Libros que no podrá dejar | 02 ENE 08

¿No sabe qué leer en estos días? I

Literatura que atrapa con inteligencia y calidad. Una serie de libros que no podrá abandonar.

Es verdad, leemos menos de lo que quisiéramos o deberíamos. Pero también es cierto que hay una voluntad latente de hacerlo que se posterga y se posterga..., la vida nos tiene tan ocupados. Esta época del año es propicia para resarcir deudas, compensar faltas y darse algunos gustos. En IntraMed le simplificamos algo el arduo proceso de selección: ¿qué podría leer?

Aquí van, una serie de libros que no podrá abandonar y que lo reconciliarán con el viejo hábito de la lectura. ¡Haga la prueba! si se arrepiente, no deje de avisarnos.

Daniel Flichtentrei 


 "La piel fría"

Albert Sánchez Piñol
Edhasa, 283 págs.

Una diminuta y remota isla en el Atlántico sur, un meteorólogo ex miembro del IRA, un hosco y agresivo farero alemán, unas criaturas anfibias con rasgos humanoides que todas las noches emergen del mar para combatirlos conforman el escenario de esta inquietante novela.

(Gacetilla) Publicada inicialmente en catalán por La Campana, ha alcanzado ya 14 ediciones, con un total de unos 70.000 ejemplares vendidos. Su traducción al castellano, publicada por Edhasa —que mereció en premio Ojo Crítico de NRE— cuenta con más de 30.000 ejemplares vendidos y una recién impresa novena edición en España. En Argentina, Edhasa lanza la primera edición nacional.

Ya se han contratado y se están haciendo las traducciones al alemán (Fischer), al francés (Actes Sud), al inglés en Estados Unidos (Farrar Straus and Giroux), al serbio (Paideia), al portugués (Teorema), al danés (Samleren), al holandés (Cossee), al italiano (Feltrinelli), al griego (Harlenic Hellas), al japonés (Chuokoron-Shinsha), al checo (Mladá Fronta), al hebreo (Rinon), al brasileño (Planeta) y al rumano (Humanitas). Además, se están tramitando las traducciones al sueco, inglés (Reino Unido), finés, noruego, polaco, croata y coreano. La novela fue finalista del premio IV Llibreter en el 2003. Hay en marcha proyectos cinematográficos.

La primera novela del antropólogo catalán Sánchez Piñol, un verdadero suceso en el mercado editorial, es un relato que combina la novela de aventuras, el terror y la ciencia ficción, y que ha sido emparentado por los críticos a maestros como Conrad, Stevenson y Lovercraft. Sánchez Piñol plasma el miedo a lo desconocido, su bestialización, en una obra original, profunda, terrible y poética.

Nacido en Barcelona en 1965, el escritor y antropólogo Albert Sánchez Piñol es miembro del Centro de Estudios Africanos, y ha colaborado en la redacción de anuarios para enciclopedias en CD-Rom. Autor del libro de relatos Les edats d`or (2001) y del ensayo satírico sobre ocho dictadores africanos Pallassos i monstres (2000), Sánchez Piñol también ha publicado, en colaboración con Marcelo Fois, Compagnie difficili (2000). La piel fría (2003), su primera incursión en el terreno de la novela, le ha valido el reconocimiento unánime de público y crítica.



Página 12  

"La piel fría"

El notable debut literario de un antropólogo español. 
Juan Pablo Bertazza

A la hora de opinar sobre Robinson Crusoe, James Joyce fue casi tan explícito como Molly Bloom en el monólogo que cierra el Ulises: “La narración del marinero náufrago nos revela, como ninguna otra obra, la profecía del Imperio”. El esquema joyceano, que ve en el personaje de Viernes a los pueblos sometidos y en el de Crusoe al colonizador británico, puede aplicarse para pensar una novela que está causando furor entre los críticos: La piel fría de Albert Sánchez Piñol, un joven antropólogo barcelonés que escribe en catalán y, hasta hace poco, era totalmente desconocido. Es que este cable a tierra de la literatura española, estructurado como una novela perfectamente circular, aborda de una forma bastante inteligente y novedosa el problema del otro.

En los albores del siglo XX, un irlandés huérfano, luego de arriesgar su vida por la Independencia en el contexto de las guerras contra –precisamente– el Reino Unido, se convierte en desertor por no tolerar la violencia y corrupción del nuevo gobierno autónomo irlandés. Y, una vez recibido de oficial atmosférico, decide trasladarse a una isla del Atlántico para investigar las variaciones meteorológicas que van a ser siempre metáforas de las alteraciones emocionales sufridas por los hombres. En aquel verdadero culo del mundo se refugiará junto a su antecesor para combatir a unos aparentes monstruos anfibios a los que llaman carasapos. Con ellos mantendrán relaciones ambiguas ya que, si por un lado, desean aniquilarlos, por el otro esclavizan a una de sus hembras para conseguir orgasmos inigualables al calor de su piel fría.

Hasta ahí lo que se ve es sólo una historia más de conquista y abuso sobre aquel otro en quien se proyectan carencias propias, ese otro sin el cual –como decía Todorov– resulta imposible pensar y llevar a cabo cualquier interpretación de signos. Y al igual que lo que pasaba con Calibán (aquel nativo de la isla de La tempestad a quien los colonizadores lo habían bautizado así tomando el mote de caníbal que –a su vez– venía de caribe), también en La piel fría a los monstruos se les dará nombres que no son para nada ajenos a la propia experiencia del mundo. A los anfibios se los llama Citauca (Acuatic) y a su hembra prisionera Aneris (Sirena).

Sin embargo, la mayor virtud del libro es volver problemática la categoría del otro. Dirá el protagonista: “Ese faro es un espejismo”. La sospecha de que las bestias acuáticas sean –en gran parte– una proyección de estos hombres enemistados por distintas razones con la humanidad, lleva a pensar en dos conclusiones: todo naufragio es voluntario y el peor enemigo es siempre uno mismo.

En esta novela, que como todo trabajo interesante es pasible de lecturas muy disímiles, la ciencia ficción y lo fantástico sirven de cortina a un agudo cuestionamiento filosófico y universal sobre la condición humana.

En los antípodas de Robinson Crusoe, una novela que consagra al individualismo feroz, La piel fría, aunque sin ingenuidades, rescata el valor de la comunidad: “Contra la adversidad, dos hombres juntos son un ejército, uno solitario sirve para muy poco”, dirá el protagonista.

Por otra parte, el bastante trillado tópico de vivir en una isla desierta está bien empleado para proponer que, en condiciones ambientales parecidas, todos somos más o menos iguales. Interesante relativización moral si se quiere generar un debate sobre cuánto hay de fantasmas propios al horrorizarnos –supuestamente– por la conducta de los otros.  


 Diario vasco
 
"El niño con el pijama a rayas"

Triunfa con su visión infantil del Holocausto judío
El irlandés John Boyne ha vendido más de 50.000 ejemplares en castellano de su novela, que será adaptada al cine
A. MOYANO/ 

El libro:
Título: El niño con el pijama a rayas
Autor: John Boyne.

SAN SEBASTIÁN. DV. El niño con el pijama a rayas (Ed. Salamandra), del escritor irlandés John Boyne (Dublín, 1971), se ha convertido en uno de los fenómenos editoriales, no sólo en España, sino en prácticamente todo el mundo. Traducido a veintidós idiomas y en pleno proceso de rodaje de la adaptación a la pantalla grande a cargo de Miramax/Disney, la novela ha despachado más de 50.000 ejemplares en España tras mantenerse en lo más alto de lista irlandesa de títulos más vendidos durante 35 semanas. Ganadora de varios premios y finalista de varios más, el éxito popular de la novela ha radicado, una vez más, en el boca-oreja entre los lectores.

 

Comentarios

Para ver los comentarios de sus colegas o para expresar su opinión debe ingresar con su cuenta de IntraMed.

AAIP RNBD
Términos y condiciones de uso | Política de privacidad | Todos los derechos reservados | Copyright 1997-2024