Síndrome Facetario

Discusión

En el dolor lumbociático, sobre todo cuando es crónico, es importante pensar en los síndromes facetarios y tener presente la irradiación del dolor en islotes que pueden abarcar la pantorrilla y hasta el tobillo. En la exploración existe dolor a la hiperextensión, falta de signos neurológicos y, en caso de duda, el Test de Mooney es positivo. La IRMN es negativa. Todos estos datos dan la base para suponer que el dolor lumbar o lumbociático es de origen facetario.

El tratamiento debe enfocarse a corregir los defectos posturales, especialmente en caso de hiperlordosis lumbar, aumento de la basculación de la pelvis y la escoliosis. En las escuelas de columna es necesario enseñar al paciente cómo debe acostarse, sentarse, caminar, manejar y levantar objetos pesados. Cuando estos tratamientos fracasan, se recomienda la rizolisis química o térmica, la cual, junto con la terapia postural y según la literatura, logra remisión del dolor por un período de más de seis meses en 71 por ciento de los casos. Esta técnica es sintomática y casi siempre temporal, por lo que debe ir acompañada de ejercicios para fortalecer los músculos abdominales y espinales que permitan una mejor estabilización. Los métodos quirúrgicos de estabilización con placas y tornillos deben elegirse como último recurso. En resumen, ante el dolor lumbociático resulta esencial distinguirlo del reflejo originado por las facetas y del sistémico por  compresión radicular.

Bibliografía

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