La participación en ensayos clínicos ha sido un pilar fundamental para los avances en el tratamiento del cáncer. Los ensayos clínicos permiten evaluar de manera rigurosa la efectividad de nuevas terapias y comparar sus beneficios en relación con los tratamientos estándar.

Se sabe que el cáncer de mama positivo para receptores de estrógeno tiene un riesgo persistente de recurrencia a distancia durante más de 20 años. Sin embargo, hay menos datos sobre el cáncer negativo para receptores de estrógeno. Este análisis utilizó datos del Grupo Colaborativo de Ensayos de Cáncer de Mama Temprano (EBCTCG) para evaluar las tasas de recurrencia y las mejoras en los tratamientos.

El artículo realizó un análisis agrupado de 155 746 mujeres con cáncer de mama temprano, quienes participaron en 151 ensayos clínicos entre 1990 y 2009. El objetivo fue investigar las tasas de recurrencia a distancia en cánceres de mama con receptores de estrógeno positivos y negativos, y las tendencias en los resultados a lo largo del tiempo.

Se incluyeron mujeres diagnosticadas con cáncer de mama temprano entre 1990 y 2009, que no tenían metástasis a distancia al momento de ingresar a los ensayos. Se excluyeron los ensayos de terapia neoadyuvante y casos con datos incompletos. El análisis principal evaluó el tiempo hasta la primera recurrencia a distancia. 

Las tasas de recurrencia a distancia mejoraron significativamente en ambos tipos de cáncer (positivo y negativo para receptores de estrógeno), con una reducción del 25 % en cánceres con receptores positivos y del 19 % en aquellos con receptores negativos, en comparación con los diagnosticados en la década de 1990.

Este progreso se atribuye, en gran medida, a una mayor proporción de mujeres con enfermedad de menor riesgo y a los avances en los tratamientos adyuvantes. Las pacientes diagnosticadas más recientemente tenían más probabilidades de tener enfermedad sin afectación de ganglios linfáticos y se observó una disminución en el riesgo de recurrencia a 10 años en ambos tipos de cáncer.

Aunque la mejora en los resultados se debe principalmente a la selección de pacientes con menor riesgo y a mejores terapias, las pacientes diagnosticadas desde el año 2000 tienen un riesgo aproximadamente un 20 % menor de recurrencia a distancia que aquellas diagnosticadas en los años 90. No obstante, el riesgo a largo plazo de recurrencia en cánceres con receptores de estrógeno positivos persiste, aunque es menor que en informes previos.

En el presente trabajo, la mejora en las tasas de recurrencia a distancia, tanto en mujeres con cáncer de mama positivo como negativo para receptores de estrógeno, refleja la relevancia de estos estudios en la evolución de la práctica clínica.

Además, los ensayos clínicos no solo ofrecen a las pacientes acceso a tratamientos innovadores, sino que también contribuyen a una mejor comprensión de la enfermedad, lo que puede traducirse en un beneficio para las futuras generaciones de pacientes. La participación en estos ensayos es, por tanto, crucial no solo para el avance científico, sino también para asegurar que las pacientes reciban los mejores tratamientos posibles en cada etapa de su enfermedad.

La participación activa en ensayos clínicos ha sido un factor clave en la mejora de la supervivencia global, destacando la importancia de seguir fomentando la investigación clínica y la inclusión de pacientes en estos estudios para continuar optimizando los tratamientos del cáncer de mama.