Introducción |
La artroplastia total de cadera (ATC) ha sido uno de los procedimientos médicos más exitosos en la medicina moderna. Los jóvenes (≤50 años) representan un pequeño porcentaje (4–10 %) de los pacientes sometidos a ATC, pero se ha observado un aumento gradual en las cifras.
Si bien la ATC ha sido el tratamiento de elección para la osteoartritis (OA) de cadera en personas mayores, históricamente los resultados han sido menos favorables en pacientes más jóvenes. Factores como un mayor nivel de actividad y la participación en deportes de alto impacto se han asociado con un mayor desgaste del polietileno y mayores tasas de revisión.
Con las mejoras en el diseño y los materiales de los implantes (polietileno altamente reticulado; PAR), las tasas de sobrevida han aumentado. Además, las causas suelen ser afecciones deformantes, como la epifisiolisis de cadera (EC), la osteonecrosis, la enfermedad de Perthes y la displasia del desarrollo de la cadera (DDC), que a menudo complican el procedimiento quirúrgico. El uso de superficies de contacto cerámica-cerámica y el auge del abordaje anterior podrían haber influido en los mejores resultados recientes.
Pocos estudios se han centrado en los efectos de las secuelas de cadera pediátricas (SCP: EC, DDC y enfermedad de Perthes) en la sobrevida a mediano y largo plazo y los resultados funcionales, y ninguno ha comparado los resultados de este grupo con otras indicaciones para ATC en pacientes menores de 40 años. Por ello se realizó un estudio de cohorte retrospectivo, consecutivo y multicirujano en un único centro académico. Se estudió la indicación de ATC en 346 pacientes (410 caderas) menores de 40 años; 239 se sometieron a ATC (58 %) y 171 a recubrimiento de cadera (42 %).
Resultados |
> Cohorte. Las ATC en la población menor de 40 años en la institución durante el período de estudio (2006-2019) mostraron un aumento del 94 %. También se observó un aumento en el número de ATC convencionales en comparación con los recubrimientos de cadera.
> Indicación de artroplastia. Las etiologías más comunes de OA terminal fueron el pinzamiento femoroacetabular (47 %) y las enfermedades pediátricas de cadera (18 %), principalmente representadas por la DDC (10 %). Entre otras causas, la necrosis avascular (NAV, 14 %) fue la más frecuente.
> Resultado de la ATC. La media de seguimiento tras el procedimiento índice fue de 7,1 ± 4,3 años (2,0-15,2). En el último seguimiento, 18 caderas (4,4 %) se habían sometido a reintervención. Los motivos fueron infección (n=6), aflojamiento aséptico acetabular (n=4), fractura del inserto (n=2), inestabilidad (n=1), fractura del cuello modular (n=1), pseudotumor (n=1), fractura periprotésica (n=1) y perforación del vástago femoral (n=1).
La sobrevida a los 5 y 10 años de toda la cohorte fue del 99,5 % ± 0,4 y del 97,2 % ± 1,2, respectivamente. Ningún parámetro demográfico ni quirúrgico se asoció con diferencias en la sobrevida. Las prótesis de recubrimiento de cadera presentaron una sobrevida similar a la de las ATC (98,8 ± 1,2 vs. 95,5 ± 2,1).
Los RRP se determinaron con las puntuaciones de cadera de Oxford (OHS: 0-48, 48 indica el mejor resultado) y de Harris (HHS: 0-100, 100 indica el mejor resultado) para 290 caderas (71 %). La media de la OHS posoperatoria fue de 45,1 ± 6,3 y la media de la HHS posoperatoria fue de 93,4 ± 12,6. Las prótesis de superficie de cadera no mostraron diferencias en la OHS posoperatoria en comparación con las ATC convencionales (45,5 ± 5,0 vs. 44,7 ± 7,0).
> Resultado de la ATC en relación con la etiología. No se observaron diferencias estadísticas en la sobrevida al comparar la etiología. Sin embargo, se observaron diferencias significativas con las diversas indicaciones de cirugía, en cuanto a las puntuaciones OHS y HHS postoperatorias. Las SCP, la NAV y la displasia mostraron mejores puntuaciones en comparación con el pinzamiento femoroacetabular y las causas inflamatorias.
Discusión |
Las etiologías más comunes de OA de cadera en pacientes jóvenes fueron el pinzamiento femoroacetabular y las SCP. La artroplastia de cadera en pacientes jóvenes muestra sobrevida a los 10 años y RRP excelentes. Las tasas de sobrevida en pacientes con SCP fueron comparables a las del resto de la cohorte, y sus RRP fueron incluso mejores.
La demanda general de ATC ha aumentado continuamente y se prevé que siga aumentando en el futuro. La prevalencia de ATC entre los jóvenes (< 40 años) también está aumentando, y estos resultados demuestran un aumento significativo (casi del doble) en un período de 13 años.
Las etiologías más comunes de artrosis terminal en esta cohorte fueron el pinzamiento femoroacetabular, seguido de las SCP y la necrosis avascular de la cabeza femoral. Estas indicaciones reflejan las observadas en la literatura previa, aunque difieren en orden. Clohisy y col. investigaron 710 ATC primarias en pacientes menores de 50 años y hallaron que la artrosis (47,5 %), la mayoría debido a DDC (48,4 %), y la osteonecrosis (28,9 %), fueron las causas más prevalentes de artrosis total de cadera. Mei y col. realizaron una revisión sistemática sobre el diagnóstico preoperatorio previo a la ATC en <55 años, y hallaron que la NAV (32,4 %), la OA (32,4 %) y la DDC (19,5 %) fueron las etiologías más comunes.
En esta cohorte, la sobrevida del implante fue del 97,2 % ± 1,2 % a los 10 años. Por lo tanto, la sobrevida en pacientes jóvenes menores de 40 años sometidos a artroplastia de cadera es muy buena y alentadora. Se ha considerado que estas tendencias se asocian principalmente al desarrollo del PAR y al diseño del implante.
Este estudio presenta ciertas limitaciones. Al ser de cohorte retrospectivo, presenta todas las limitaciones propias de este diseño. Los implantes utilizados y los abordajes no fueron homogéneos y reflejan cambios institucionales en los proveedores y la práctica individual de los cirujanos.
Conclusión |
La mejora de la ATC y su sobrevida han favorecido su implantación en pacientes muy jóvenes en las últimas décadas. Su principal indicación antes de los 40 años son las SCP.
Este estudio muestra una muy buena sobrevida de la artroplastia de cadera a mediano y largo plazo en estos pacientes jóvenes. Aunque las SCP suelen complicar la cirugía, no se hallaron diferencias con el resto de la cohorte en términos de sobrevida, y las SCP tienen incluso mejores RRP, probablemente porque los pacientes responden mejor a la mejora de la función.
Estos resultados, en consonancia con la literatura reciente, muestran resultados similares a los de pacientes mayores y respaldan la idea de que se puede realizar este tipo de cirugía con seguridad en pacientes jóvenes.