Resultados a largo plazo

Linaclotida en el síndrome de intestino irritable tipo estreñimiento

Se ha mostrado eficaz y seguro, reduciendo de forma significativa el dolor y la sensación de hinchazón e incrementando el número de deposiciones espontáneas por semana

Autor/a: F. Geijo Martínez, A. Sánchez Garrido, H. Marcos Prieto y colaboradores

Fuente: Resultados a largo plazo del tratamiento con linaclotida en el síndrome de intestino irritable tipo estreñimiento

Introducción

El síndrome del intestino irritable (SII) es un trastorno gastrointestinal (GI) que afecta a hasta un 15% de la población europea y norteamericana y que se caracteriza por dolor abdominal, estreñimiento y/o diarrea y sensación de hinchazón.

En España, la prevalencia, de acuerdo con los criterios de Roma III, era del 8,3%.En la práctica clínica, el SII-E representa un desafío tanto desde el punto de vista diagnóstico como terapéutico, por lo que es necesario establecer directrices clínicas específicas. Actualmente, el manejo terapéutico de este trastorno se basa en una combinación de cambios en el estilo de vida y la administración de ciertos tratamientos sintomáticos no específicos.

La linaclotida es un agonista selectivo del receptor de la guanilato ciclasa C (GC-C). El receptor GC-C se expresa en la superficie luminal de las células epiteliales intestinales y su activación conduce a un aumento significativo de las concentraciones intracelulares y extracelulares de GMP cíclico (GMPc).

El GMPc está involucrado en una amplia gama de procesos fisiológicos, que incluyen la regulación de la homeostasis de los líquidos intestinales y la modulación de la actividad del nervio intestinal aferente, lo que puede estar relacionado con sus efectos analgésicos.

La eficacia y seguridad de linaclotida en pacientes con SII-E se ha demostrado en dos ensayos clínicos multicéntricos de fase III, aleatorizados, doble ciego, comparados con placebo, así como en análisis adicionales. Hasta donde los autores conocen, desde su aprobación en 2012 no hay ningún trabajo indexado en práctica clínica real. El objetivo de este estudio es evaluar la efectividad, la seguridad y el grado de satisfacción de linaclotida en pacientes con SII-E en la práctica clínica.


Métodos

Estudio prospectivo, unicéntrico y observacional realizado en pacientes con diagnóstico de SII-E. Los pacientes recibieron tratamiento con linaclotida, 290 microgramos/24 horas, una cápsula 30 minutos antes del desayuno.

La variable primaria de efectividad fue el número de deposiciones por semana. Las variables secundarias incluían el grado de satisfacción y el registro de la frecuencia e intensidad de los síntomas (dolor e hinchazón), medidos mediante una escala visual analógica (EVA) de once niveles (0-10), y recogidas mediante un diario que se entregó al paciente.


Resultados

De los 110 pacientes que fueron evaluados, 30 (100% mujeres) cumplieron los criterios de inclusión/exclusión y fueron incluidos en el análisis. Cinco (16,7%) requirieron medicación concomitante con laxantes como tratamiento de rescate a lo largo del estudio, cuatro de las cuales suspendieron el tratamiento con linaclotida por presentar una efectividad insuficiente. La media de edad fue de 50,3 años.

A lo largo del estudio, 13 (43,3%) pacientes suspendieron el tratamiento, siete pacientes por no haberse demostrado la efectividad del tratamiento o por presentar una efectividad insuficiente pese al tratamiento de rescate con laxantes, cuatro por disminución de los efectos del tratamiento a lo largo del estudio y dos por suspensión del tratamiento y no presentar una recaída de la enfermedad durante el seguimiento.

El análisis final del estudio muestra una tasa de mejoría total del 63,3% (19/30), con una mediana (IC 95%) de tiempo de seguimiento de 18,0 (8,4 a 25,7) meses.

De las 30 pacientes evaluadas en el mes 1, 23 (76,7%) mejoraron con el tratamiento de linaclotida, 19 (63,3%) de forma total y cuatro (13,3%) como mejoría parcial (dolor e hinchazón). De las 19 pacientes que realizaron un control de visita a los 12 meses, un 52,6% (10/19) fue clasificado como mejoría total, y de las 12 pacientes que realizaron una vista al mes 24, cinco (41,7%) fueron clasificadas como mejoría total.

El número medio de deposiciones por semana aumentó desde 0,9 al inicio del estudio hasta 4,7 al final del mismo. Resultados similares fueron observados, con el dolor y con la hinchazón. Un aumento mayor o igual a cuatro deposiciones/semana fue observado en el 56,7% (17/30) de los pacientes. Una reducción de tres unidades en la escala del dolor o en la sensación de hinchazón fue referida por el 53,5% (16/30) y el 63,3% (19/30) de las pacientes, respectivamente.

Más del 70% de los pacientes indicó estar satisfecho con el tratamiento al mes 1 en relación a la satisfacción con tratamientos anteriores. El grado de satisfacción del paciente se mantuvo a lo largo del estudio, sin mostrar diferencias significativas. El grado de satisfacción fue 0,70 (EE 0,10) unidades mayor por cada unidad que aumente el número deposición/semana.

Por cada unidad de dolor que se redujo, el grado de satisfacción aumentó en 0,84 (0,19) unidades y por cada unidad que se redujo el grado de hinchazón, el grado de satisfacción aumentó en 0,88 (0,13) unidades.

No se detectaron acontecimientos adversos (AA) graves en el estudio. A lo largo del seguimiento del estudio, once (36,7%) pacientes reportaron, al menos, un AA (diarrea: ocho [26,7%] pacientes; dolor abdominal: tres [10,0%] pacientes). La mayoría de los acontecimientos adversos fueron catalogados como leves (90,1%). Una paciente presentó un episodio de diarrea clasificado como moderado que se resolvió sin necesidad de tratamiento médico.


Discusión

Los resultados de este estudio mostraron que la administración de una capsula/día de linaclotida, administrada 30 minutos antes del desayuno, mejoró de forma significativa la sintomatología, tanto abdominal como intestinal, de los pacientes con SII-E.

La eficacia y seguridad de linaclotida en pacientes con SII-E se ha demostrado en dos ensayos clínicos multicéntricos de fase III, aleatorizados, doble ciego, comparados con placebo, así como en análisis adicionales.

La proporción de pacientes que obtuvieron un aumento en el número de deposiciones superior o igual a cuatro o una reducción de tres unidades en la escala del dolor o en la sensación de hinchazón parece ser superior a la publicada por los ensayos clínicos de fase III. Sin embargo, debido a que se han utilizado diferentes criterios de éxito y que las poblaciones pueden diferir, la comparación de los resultados es compleja.

En este estudio, once pacientes (36,7%) presentaron ausencia o pérdida de respuesta a lo largo del seguimiento del estudio. El número de pacientes que abandonaron el tratamiento por una respuesta insuficiente fue superior al publicado en los ensayos clínicos, exactamente cinco y 15.

Sin embargo, como se ha mencionado anteriormente, es difícil establecer una comparación con estos estudios. La información relativa al uso de linaclotida en pacientes con SII-E, en la práctica clínica, es limitada.

El grado de satisfacción medio observado en el estudio no declinó a lo largo del tiempo, manteniéndose en cifras entre 5,9 y 6,9 sobre 10.

En cuanto a la relación existente entre la mejoría en los parámetros clínicos y el grado de satisfacción, la mejoría de los parámetros clínicos se relacionó, de manera significativa, con el grado de satisfacción de los pacientes, sin que se observaran diferencias significativas entre ellos. Un 36,7% de los pacientes reportaron, al menos, un AA, ninguno de ellos grave.

Este estudio tiene limitaciones inherentes con respecto a la interpretación de sus resultados, ya que es un estudio abierto, no aleatorizado y no comparativo por diseño. Sin embargo, los resultados obtenidos están en consonancia con los hallazgos de los ensayos clínicos aleatorizados que evaluaron la terapia con linaclotida. En este estudio no se evaluó la consistencia de las heces, por lo que esto podría suponer una limitación a la hora de interpretar los resultados.

Habría que mencionar que en este estudio un 36,7% de los pacientes abandonó el tratamiento por ausencia o pérdida de eficacia a lo largo del estudio, lo que podría suponer una limitación a la hora de generalizar los resultados. Otra limitación del estudio es que la última observación obtenida se trasladó hacia delante para realizar el análisis de efectividad, lo que podría suponer un sesgo.

En resumen, el tratamiento con linaclotida en pacientes con SII-E en el entorno de la práctica clínica se ha mostrado eficaz y seguro a largo plazo, reduciendo de forma significativa el dolor y la sensación de hinchazón e incrementando el número de deposiciones espontáneas por semana. Sería interesante realizar estudios multicéntricos que evalúen los posibles factores relacionados con la falta o pérdida de respuesta terapéutica a lo largo del tiempo.