ORGANIZACION PANAMERICANA DE LA SALUD
Oficina Regional, Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS)
Una reunión en la sede regional de la Organización Panamericana de la Salud en Washington, D.C. convocó a líderes y expertos de instituciones y entidades internacionales de desarrollo para discutir estrategias comunes de una acción coordinada e integral que con el fortalecimiento de la Coalición Interamericana para la Prevención de la Violencia logre confrontar y revertir los elevados índices de violencia que se están experimentando en la Región de las Américas.
Washington, D.C. 15 de marzo de 2007 (OPS) – La Directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) aseguró esta semana en Washington que aunque se ha hecho mucho hasta este momento contra la violencia y contra sus determinantes desde la perspectiva de las instituciones, es necesario ahora un acercamiento mucho más integral y coordinado para uno de los más críticos problemas de la Región.
“Este esfuerzo debe descentralizarse”, afirmó la Dra. Mirta Roses Periago en el transcurso de una reunión con líderes y expertos de organismos internacionales y entidades de desarrollo. “Es evidente que aquí tenemos representada una gran colección de experiencias y de herramientas de respuesta al fenómeno de la violencia. Pero este esfuerzo -prosiguió la Directora de la OPS- debe descentralizarse y enfocarse ahora de una forma integral y mucho más coordinada entre todos nosotros para que con nuestra ayuda y compromiso podamos llevar estos esfuerzos al nivel de los países”.
“Podemos trabajar juntos”
En la reunión, el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, concedió una gran importancia a los esfuerzos que se estaban tratando de perseguir contra la violencia. Esta reunión, dijo el Secretario General, “es un intento por probar que las organizaciones internacionales pueden trabajar juntos en la coordinación de esfuerzos contra el fenómeno de la violencia, y lo digo porque esto no siempre es así”, admitió Insulza.
El Secretario General de la OEA ejemplificó la gravedad de la violencia en la Región al afirmar que el principal problema de muchos países de Centroamérica como Honduras, Guatemala o El Salvador -dijo- es precisamente el crimen y la violencia. “En Honduras, los gangs (bandas juveniles) superan ya en número al tamaño de la policía”, aseguró el Secretario General de la OEA.
En unas palabras de introducción a la reunión y al tiempo de agradecer la presencia de todos los participantes, la Dra. Roses aseguró que la Coalición Interamericana para la Prevención de la Violencia (CIAPV) ha llegado a un ‘punto crítico’ y a un ‘estado de madurez’ que hace necesario la reformulación del compromiso de las agencias e instituciones internacionales para que verbalicen su apoyo y se sumen con recursos de financiación para que a través de este instrumento se ejecute una acción coordinada e integral que vaya más allá de las actividades y programas puntuales que se realizan en varios países de la Región.
La CIAPV fue establecida en el año 2000 como resultado de la preocupación común de los gobiernos, ciudadanía y organismos internacionales por disminuir los niveles de violencia en la Región. Uno de las entidades que más ha apoyado financieramente sus actividades en los últimos años ha sido los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC), de los Estados Unidos.
En un mensaje de la Coalición se subraya que “al movilizar recursos y crear alianzas de manera conjunta, la Coalición aumenta su efectividad y promueve políticas para obtener una mejoría en la seguridad y el bienestar de la ciudadanía. La sinergia obtenida hace que el trabajo como coalición sea más efectivo que el de la suma de sus partes”.
En la página de Internet de la CIAPV se indica además que los miembros de la coalición creen que un trabajo en conjunto permitirá apoyar en forma más efectiva las iniciativas de los gobiernos, la sociedad civil y el sector privado para la prevención de la violencia y la reconstrucción del capital social a escala nacional, local y comunitaria.
Foco integral y coordinado
Los representantes convocados a la reunión en la OPS provenían de la OEA así como del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), de la Agencia Internacional de Estados Unidos para el Desarrollo (USAID), y de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC), también de Estados Unidos. También tomaron parte oficiales del Banco Mundial (BM), y expertos de varios organismos y agencias de desarrollo del sistema de Naciones Unidas como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDP), el United Nations Human Settlements Program (UN-Habitat) y de la United Nations Office on Drugs and Crime (UNODC).
En representación del BID, Marco Ferroni aseguró que el crimen y la violencia en la Región de las Amétricas es ‘tan intenso’, que de hecho ya se ha convertido en un problema de Salud Pública.
Este experto en Desarrollo Sostenible del BID hizo un balance resumido de los 14 proyectos y de los 20 programas actualmente financiados por el BID para la lucha contra la violencia en los países de las Américas. Ferroni puntualizó que al interior del BID se está tratando de aplicar un énfasis en la prevención, algo que -afirmó- debe ser potenciado en toda la Región.
La oficial representante del Banco Mundial, Carolina Antsey, coincidió por su parte con la Dra. Roses en la idea de confrontar el problema de la violencia desde una perspectiva mucho más integral y coordinadaza ya que, afirmó, estos asuntos se están atendiendo, pero de una manera muy fragmentada. “Por eso es tan importante que estemos aquí reunidos para coordinar estos esfuerzos”.
Por parte de los CDC, Rodney Hammond –Director de la División de Prevención de la Violencia- expresó su satisfacción por el hecho de que los CDC hayan financiado a la Coalición durante los últimos 5 años. “Nuestra misión es la mejora de la calidad de vida de las personas mediante la prevención de lesiones y muerte por violencia”, dijo. Sin embargo, el funcionario reconoció que “nuestros esfuerzos sólo cosecharán logros reales con asociaciones como la que representa esta Coalición, de cuyos resultados estamos satisfechos como uno de sus miembros fundadores”.
Procedente de la USAID, Mark Silverman dijo sentirse muy cercano a la materia en discusión en razón a su residencia en El Salvador durante largo tiempo. Esta experiencia, afirmó, le llevó a comprender que comunidades saludables fomentan más oportunidades para todos. “Este asunto de la violencia no es un tema vertical”, afirmó Silverman. “Las comunidades y los gobiernos locales son la clave para la solución. Por ello, la coordinación de donaciones internacionales al nivel local es algo fundamental”.
Finalmente, un representante de la UNDP afirmó en su intervención que más de la mitad del trabajo que realiza su agencia tiene que ver con asuntos de gobernabilidad y prevención de conflictos. Los conflictos -enfatizó el experto- “erosionan las instituciones y su gobernabilidad. Y nuestros esfuerzos están encaminados a parar esta espiral en la Región”.
Como entidad anfitriona que hasta ahora ha sido de la CIAPV, la OPS reiteró la importancia de potenciar y buscar compromisos en apoyo de los esfuerzos de la coalición. La reunión en la sede regional de la OPS en Washington también significó el relevo de la OPS a la OEA en su auspicio como anfitrión de una CIAPV a la que se le está tratando de dotar ahora de una adecuada capacidad en su papel designado de responder con estrategias eficaces y desde una perspectiva integral a la epidemia de violencia que sufren muchos países en las Américas, una de las regiones del mundo que también adolece de los mayores niveles de inequidad económica y social.
Coalición Interamericana para la Prevención de la Violencia
La OPS fue establecida en 1902 y es la organización de salud pública más antigua del mundo. Es la Oficina Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud y trabaja con los países para mejorar la salud y elevar la calidad de vida de sus habitantes.