Infección Temprana

Detección del Helicobacter pylori en heces de niños recién nacidos

El estudio presente fue diseñado determinar la presencia de H. pylori en heces de lactantes recién nacidos y determinar la posibilidad de transmisión temprana de madre a lactante.

Autor/a: Dres. Fujimura, Shigeru PhD,; Kato, el Seiichi et al.

Fuente: Pediat Infect Dis J. 2004 23(11):1055-1056

El Helicobacter pylori es una de las infecciones bacterianas más comunes en el mundo; se piensa que la mitad de la población mundial está infectada con el organismo. El H. pylori es asociado con la patogénesis de la gastritis crónica, enfermedad de úlcera péptica, y asociado con el cáncer gástrico y linfoma del tejido linfoide de la mucosa. Se ha sugerido que el predominio de H. pylori se asocia con el estado socio-económico en la niñez y esa niñez es crítica para la adquisición de la infección por H. pylori.

Sin embargo, la vía de transmisión no se conoce, aunque varios estudios han hecho pensar en la infección intrafamiliar, madre a niño o transmisión de niño a niño. Gottrand et al informó la infección por H. pylori en 3 lactantes menores de 6 meses de edad. En los países en vías de desarrollo, se ha informado que lactantes y niños jóvenes están frecuentemente infectados con el H. pylori. El estudio presente fue diseñado determinar la presencia de H. pylori en heces de lactantes recién nacidos y determinar la posibilidad de transmisión temprana de madre a lactante.

Con el objetivo de investigar la vía de transmisión del Helicobacter pylori, en 50 lactantes de 3 días de edad, nacidos entre abril y agosto de 2002 fueron estudiadas las muestras de heces por inmunoensayo de antígenos de heces y reacción en cadena de la polymerasa (PCR). Además, se registró el alimento suministrado lactancia natural, artificial o mixta.  Por PCR, el ADN del H. pylori se descubrió en 15 neonatos (30%). La prueba de antígeno de heces era positiva en sólo 1 neonato con PCR positiva.
Para estimar el H. pylori en las madres que tenían edades de 20-42 años (media, 30 años), se determinó por ELISA el anticuerpo IgG anti-H pylori en orina.

La proporción de descubrimiento del ADN del H. pylori en  neonatos era significativamente más alta para aquéllos con madres que tenían orinas positivas para el anticuerpo de IgG anti-H. pylori (60%) que para las madres con  orinas negativas (17%) (P <0.01). Un estudio de seguimiento realizado 24 meses después, 8 de los 15 lactantes con resultados positivos de PCR, incluido el lactante con la prueba de antígenos positiva. Todos los lactantes eran negativos por PCR y prueba de antígeno de heces. 

Discusión  

En este estudio preliminar, el método de PCR era el 10 veces más sensible que la prueba de antígeno de heces, sugiriendo que la carga bacteriana es más alta en los medios de prueba de heces positivos. La prueba de antígeno de heces mostró alta sensibilidad y especificidad para el diagnóstico de infección por H. pylori en los niños. Por consiguiente hay una posibilidad que los resultados positivos de PCR  no reflejen  la infección activa por H. pylori, como se refleja en el seguimiento que mostró que la infección no era establecida en ningún infante.

Es incierto si el infante con prueba de antígeno con resultado positivo se infectó temporalmente con el H. pylori, dado que ni el examen histológico ni el cultivo de muestra de biopsia gástrica tampoco fueron positivos. La infección por H. pylori raramente se establece precozmente en los infantes. De los datos de este estudio, se sugiere que el H. pylori puede transmitirse a los recién nacidos vía la madre. 
 
En el estudio presente, todos los lactantes recién nacidos se manejaron higiénicamente en un hospital de ginecología. Se ha informado que el ADN del H. pylori se descubrió en la leche del pecho de madres con infección por H. pylori. Por otro lado, Malaty et al informaron que el amamantamiento previene la infección por H. pylori. En el estudio presente, no había ninguna diferencia significativa en el descubrimiento de esté y el método de alimentación. Aunque no se investigó el ADN del H. pylori de la leche de pecho, los autores creen que la posibilidad de transmisión horizontal vía la leche del pecho es baja. 
 
En Japón, la infección por H. pylori se establece raramente en los infantes menores de 1 año de edad. El descubrimiento de H. pylori  en el período neonatal en este estudio no llevó a la adquisición de infección persistente activa con el H. pylori a posteriori. Por consiguiente parece que la transmisión de madre a hijo sugerido por los datos obtenidos no es importante en los países desarrollados incluido Japón.