Objetivo:
Valorar la actividad in vitro y la eficacia y tolerancia in vivo de AMS, de trabajos publicados entre 1989 y 1996. Dos investigadores decidieron, independientemente, los estudios a incluir en base a su información y calidad.
Estudios in vitro: 11 trabajos que presentaban la sensibilidad a distintas series bacterianas obtenidas de muestras diversas. La respuesta bacteriológica se clasificó como sensible (S) o resistente (R).
Estudios in vivo: 33 estudios; 3 con voluntarios sanos (farmacocinética) y 30 con distintas series de pacientes con diversas patologías infecciosas: ginecológicas, urinarias, gonocócica no diseminada, intraabdominales, respiratorias superiores, respiratorias inferiores, piel y partes blandas y profilaxis quirúrgica, que habían recibido AMS (oral y/o inyectable). Se estimó la eficacia aplicando el criterio de "intención de tratar" y no el criterio "por protocolo", recalculando la eficacia clínica si este parámetro no estaba expresado en el estudio "por intención de tratar".
Resultados:
En los estudios in vitro el porcentaje de sensibilidad a AMS fue para E. coli 76%, infecciones polimicrobianas 93%, B. fragilis 100%, Klebsiella spp 57% , Proteus spp 82%, S. aureus oxa-S 100%, S. aureus oxa-R 32 % y E. faecalis 100%.
Estudios in vivo: Tanto en las concentraciones altas (500 mg de A + 500 mg de S), como en las bajas (250 mg de A + 250 mg de S), ambos fármacos presentaron niveles plasmáticos y urinarios adecuados, así como el poder bactericida del suero mostró que AMS se encontraba en concentraciones bactericidas.
AMS fue altamente efectiva (> 90%) en las distintas patologías evaluadas, siendo la incidencia de efectos adversos sólo del 9,8% (127/1.294) con 1% (13/1.294) de abandonos.
Conclusiones:
AMS mostró una excelente actividad in vitro frente a anaerobios (incluyendo B. fragilis) y la mayoría de los aerobios (excepto S. aureus oxacilino resistente, P. aeruginosa y algunas bacterias multirresistentes).
Tanto por vía oral como inyectable, AMS tiene una evidente utilidad clínica, especialmente en infecciones abdominales y ginecológicas, además de las respiratorias, urinarias, de piel y partes blandas, entre otras.
Su actividad es comparable a otras aminopenicilinas combinadas con inhibidores de betalactamasas. AMS es bien tolerada, observándose algunas manifestaciones gastrointestinales (10%) con una tasa de abandono del 1%.