El acné conglobata es una rara enfermedad en que, muchos de los comedones son dobles, acompañados de pápulas, pústulas, abscesos enormes indoloros.1 Pueden estar asociados con obstrucción e inflamación de las glándulas apocrinas de la axila, mama, periné; produciendo la hidroadenitis supurativa.2,3
La hidroadenitis supurativa es recidivante y se caracteriza por abscesos, fístulas, craterizaciones y con 0.34% de prevalencia en países industrializados en mujeres jóvenes.4 Los síntomas iniciales son prurito, eritema, hiperhidrosis local; luego aparece un nódulo con ruptura espontánea produciendo una descarga purulenta. Tiene varios sinónimos: apocrinitis, hidroadenitis axilar, acné inversa.
Los ambientes calientes, húmedos favorecen su desarrollo. Las lesiones profundas ocasionan fístulas anales y los casos más avanzados abscesos fluctuantes.
La axila es la zona de mayor frecuencia, luego la región anogenital, mamas, región periumbinical, cuero cabelludo, área malar y zigomática de la cara, nalgas, ingle y fosa poplítea.
Hay obstrucción inicial con queratina, luego dilatación, inflamación e invasión bacteriana del ducto apocrino. Este componente bacteriano, es secundario, con flora cambiante de estafilococos, estreptococos y Gram negativos. En la zona perianal E. Coli, Klebsiella, Proteus, anaeróbicos, Bacteroides fragilis y melanogénicos.
Algunos implican al estreptococo milleri, que coloniza con frecuencia la región gastrointestinal y tracto genital femenino.
En la histopatología hay hiperqueratosis del folículo terminal con oclusión y dilatación al inicio, luego perifoliculitis con infiltrado de neutrófilos, linfocitos e histiocitos.4
Hemos manejado un paciente de 36 años de edad con historia de 4 años de evolución, inicialmente con pústulas en ambos glúteos que fueron creciendo con secreción fétida, dolor y tratado con múltiples antibióticos.
Estuvo hospitalizado en los servicios de cirugía, proctología, insectología sin mejoría. En su última hospitalización fue referido al servicio de cirugía y encontramos a un paciente con una autoestima muy baja, crisis depresiva, quejándose de dolores intensos y deseos de intento autolítico. Al examen físico febrícula, peso de 119 libras y su habitual es de 135 libras. En la cara presentaba comedones abiertos, quistes sebáceos en región preauricular y cicatrices atróficas en mejillas. Quistes en bolsas escrotales que drenaron espontáneamente.
En la región glútea presenta masas induradas hipercrómicas que al presionarlas drenaban rezumamiento purulento abundante y además una úlcera en tercio superior derecho, ovalada, borde irregular de 4x5 cm.
Los exámenes de glucosa, creatinina, ácido úrico, fosfatasa alcalina, proteínas totales y fraccionadas, V.D.R.L., antígenos, febriles, frotis para BAAR, radiografía de tórax y EKG estaban normales.
Hemoglobina=7.9; L=10,000; VES=58; tipaje=0 negativo; PCR=1: 16; PPD=18mm.
Los cultivos de secreción fueron K. Pneumoniae; E. Coli; estreptococo gama hemolítica; estafilococo coagulasa negativo; sensibles a amoxicilina-ácido clavulánico, imipenen, cotromaxizol, amikacina, neomicina, eritromicina, penicilina, vancomicina.
La histología mostró hiperqueratosis, inflamación y trayectos. Fue medicado, con metamisol magnésico, diclofenac sódico, ranitidina,cefalosporina de segunda generación, posteriormente con penicilina sódica,
eritromicina, sulfato de amikacina, imipenem y tratamiento profiláctico con isoniazida. Se le transfundió una unidad de glóbulos rojos empacados, y lavados; se le agregó a su tratamiento sulfato ferroso y ácido fólico.
Localmente se hizo curación diaria con drenaje de gasa iodoformada y solución salina y luego utilizamos ritampicina y hubo disminución de la secreción purulenta. Al cabo de 54 días de hospitalización se le dio salida con control ambulatorio.