El grado de discrepancia en la longitud de los miembros inferiores necesario para afectar de manera adversa los parámetros de la marcha en ancianos es aún desconocido. Recientemente, un grupo de investigadores con sede en Nuevo México (EEUU) llevó a cabo una investigación para determinar los efectos de la discrepancia en la longitud del miembro en la economía de la marcha y en la actividad de la extremidad inferior del músculo en ancianos.
Durante la investigación fue estudiado un total de 44 hombres y mujeres con una edad entre 55 y 86 años sin evidencia de una discrepancia en la longitud del miembro mayor de 1 cm. Los sujetos caminaron sobre una cinta caminando a un paso normal determinado por ellos mismos, con una discrepancia artificial en la longitud del miembro de 0, 2, 3 y 4 cm aplicada en un orden de selección al azar. Fue utilizado un método de calorimetría indirecta para medir el consumo de oxígeno y la ventilación por minuto. También se utilizó una electromiografia para medir la actividad del músculo de los cuádriceps femorales izquierdo y derecho, los flexores plantares, los glúteos superiores y los glúteos medios. El índice cardíaco, el nivel de esfuerzo percibido y la frecuencia de los patrones de compensación de la marcha también fueron evaluados.
De acuerdo a los resultados arrojados por el estudio, se observó un incremento significativo en el consumo de oxígeno y en el nivel de esfuerzo percibido con discrepancias artificiales de 2, 3 y 4 cm, así como un incremento del índice cardíaco, la ventilación por minuto y la actividad de los cuádriceps en el miembro más largo con discrepancias artificiales en la longitud del miembro de 3 y 4 cm y se observó un incremento significativo en la actividad del flexor plantar en el miembro más corto con una discrepancia artificial en la longitud del miembro de 4 cm, comparados con los mismos parámetros en miembros sin discrepancia.
Tanto el consumo de oxígeno como el nivel de esfuerzo precibido fue mayor con una discrepancia artificial en la longitud del miembro de 2 cm de lo que fueron sin discrepancia. Se ha observado un aparente punto de ruptura entre las discrepancias artificiales en la longitud del miembro de 2 y 3 cm en ancianos, teniendo en cuenta los efectos en muchos otros parámetros fisiológicos. La discrepancia artificial en la longitud del miembro de 3 cm es propensa a inducir una fatiga significativa en los cuádriceps de la extremidad más larga. Los pacientes mayores con enfermedad sustancial pulmonar, cardíaca o neuromuscular pueden presentar dificultades al caminar con una discrepancia en la longitud del miembro de 2 cm.