El primer bebé con dos mamás

Por Sibila Camps

A medida que crezca –y que también continúen sancionándose leyes que previenen y evitan la discriminación–, a Vicente M. le crecerá además el orgullo de ser el primer hijo inscrito en el Registro Civil con dos madres legalmente reconocidas. Este paso adelante en los derechos civiles es consecuencia directa de otra conquista, la reforma del Código Civil que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Cecilia M. y Verónica F., ambas madres primerizas, se habían embarazado por inseminación artificial antes incluso del 15 de julio, cuando se sancionó la ley de matrimonio igualitario. Cuando se casaron, el 11 de agosto, Cecilia lucía una panza acorde con el último mes de gestación.

Vicente nació hace una semana en el Sanatorio Anchorena, a término aunque por cesárea. Ni bien su mamá biológica se recuperó de la operación, ambas madres fueron a inscribirlo, ayer por la mañana, en la sede central del Registro Civil porteño.

Si bien no son activistas por los derechos civiles de las parejas del mismo sexo, pidieron asesoramiento a tres organizaciones que siguieron de cerca la implementación de la ley de matrimonio igualitario en instancias administrativas del Gobierno de la Ciudad: Lesmadres, 100% Diversidad y Derechos, y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).

Animado por el anticipo primaveral y protegido en su cochecito, Vicente tuvo su primera salida de paseo. Al principio concentró la chochera de las y los militantes que se acercaron al Registro Civil para acompañar a las madres. Pero un rato después, lo más interesante pasó a ser su Documento Nacional de Identidad y su partida de nacimiento.

El bebé quedó registrado según el artículo 36, correspondiente al Capítulo VII/ Nacimientos, de la ley 26.618, de matrimonio igualitario. La norma establece que la inscripción de los hijos y las hijas deberá contener, “en el caso de hijos de matrimonios entre personas del mismo sexo, el nombre y apellido de la madre y su cónyuge”. Y sus mamás volvieron a su casa con su nombre anotado en la libreta roja de matrimonio como hijo de la pareja legalmente casada.