Bloqueo del ganglio de Walter (ganglio impar)

En sus primeros informes sobre la técnica, Plancarte destaca la realización de un abordaje más inferior, para lo cual colocaba un dedo a través del orificio anal a fin de evitar la perforación del recto. Wemm y Saberski publicaron, en 1995, una modificación de esta técnica que consistía en implantar la aguja atravesando directamente el ligamento anocoxígeo, lo que evita la lesión de estructuras más inferiores y la necesidad de introducir un dedo a través del orificio anal para prevenir la perforación del recto al insertar la aguja. Esta modificación disminuye la posibilidad de irritación de los tejidos y aumenta la tolerancia del paciente al procedimiento.

Se han publicado casos clínicos en los que se utilizó tomografía computada con reconstrucción tridimensional para el bloqueo del ganglio impar. Los autores sostienen que el uso de este método para realizar el bloqueo brinda una mayor seguridad en cuanto a la posición correcta de la aguja y a la posterior efectividad del tratamiento.

En la mayoría de los casos el emplazamiento de la aguja es relativamente derecho hacia adelante. La invasión local del tumor, particularmente del cáncer rectal, puede impedir la difusión de la solución inyectada. Antes de la inyección de neurolítico es fundamental observar que la difusión del material de contraste no esté restringida al retroperitoneo para corroborar que la posición de la aguja es correcta.

Complicaciones
A pesar de los cuidados que se tomen para confirmar la orientación anteroposterior de la aguja, es posible que surjan ciertas complicac