La falta de exposición a la luz solar no es responsable de la reducción de los niveles de vitamina D en los adultos edad avanzada con sobrepeso, según ha demostrado un estudio de la Tufts University (Estados Unidos), publicado en “Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism”. En cambio, es posible que la grasa excesiva impida que el nutriente llegue al torrente sanguíneo.
Para el estudio, se analizaron datos de 381 hombres y mujeres de más de 65 años que participaban en una investigación sobre suplementos de calcio y vitamina D para prevenir la pérdida de masa ósea.
Cuando se dividió a los participantes en cuatro grupos según el porcentaje de grasa corporal, los autores no hallaron diferencias, entre los grupos, respecto al tiempo pasado al aire libre, el porcentaje de piel expuesta al sol o el uso de pantalla solar.
Los autores descubrieron que las personas con los porcentajes más altos de grasa corporal tenían un 20% menos de vitamina D en sangre que aquellos con menos grasa corporal.
"De alguna manera, la vitamina D queda atrapada en el tejido graso, por lo que la sangre no la puede transportar", indicaron los investigadores. Lo mismo ocurriría si la vitamina D se obtuviese mediante la alimentación, los suplementos o la exposición al sol.
"En general, las personas más obesas necesitarían más vitamina D, ya sea a través de más exposición al sol o de la alimentación, porque un cierto nivel de consumo no aportará el mismo nivel en sangre", concluyeron los autores.
Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism 2007;92:3155-3157