Prevención

El cáncer de colon y de recto se puede prevenir

Desde los 50 años conviene hacerse todos los años estudios de materias fecales y cada 5, endoscopías.

Cambios en la dieta, abandono del tabaco y exámenes de materia fecal y endoscopías demostraron disminuir el número de muertes. El cáncer de colon es la tercer causa de cáncer en los hombres y la segunda en la mujer. Más de la mitad de las muertes por este cáncer podrían evitarse si todas las personas mayores de 50 años se realizaran tests de screening periódicamente para detectar precozmente lesiones premalignas o cáncer.

Prevención

Cambios de el estilo de vida pueden disminuir el riesgo de padecer esta enfermedad. Los adultos activos físicamente tienen menos riesgo de desarrollar cáncer de colon que los sedentarios.

Cuanta más carne roja se coma, mayor es el riesgo. Comer carne roja diariamente aumenta el riesgo en 50%. El ácido fólico, por lo contrario, parece ser un nutriente protector.

Hay factores de riesgo que son muy importantes como tener familiares con cáncer de colon, síndromes genéticos predisponentes o padecer colitis ulcerosa crónica.

Una exposición prolongada al tabaco aumenta el riesgo de pólipos colónicos que preceden al cáncer y cuanto mayor el tiempo de tabaquismo, mayor es el riesgo. La ingesta de alcohol también aumenta el riesgo. Por que estudiarse: la historia natural de este cáncer lo vuelve ideal para screening. La mayoría de los cánceres colorrectales se desarrollan a partir de pólipos colónicos que son sobre elevaciones en el interior del intestino. Pero pasan varios años desde que aparecen los pólipos hasta que se transforman en malignos. Este tiempo da una excelente oportunidad para detectarlo.

Cuando el cáncer de colon se detecta precozmente, cuando aún está localizado, cerca del 90 % de los pacientes sobreviven con tratamiento. Pero lamentablemente menos del 40% son detectados en forma temprana.

Como más del noventa por ciento de los cánceres de colon aparecen en personas mayores de 50 años, se aconseja que a partir de esa edad comiencen a hacerse los exámenes periódicos. Aunque puede ser necesario comenzar la evaluación a menor edad si se tienen factores de riesgo para estos tumores. Los tests de sreening sirven para detectar pólipos y removerlos antes que se vuelvan cancerosos. También permiten la detección temprana del cáncer cuando el tratamiento es más efectivo.

Exámenes

Varias organizaciones científicas aconsejan realizar tests diagnósticos rutinarios a todas las personas mayores de cincuenta años. Estos tests se deben realizar aunque no se tengan síntomas, porque precisamente el interés es detectar lesiones premalignas o malignas muy incipientes. Las técnicas disponibles son: detección de sangre en materias fecales, rectosigmoidoscopía, fibrocolonoscopía, colon por enema.

El primer estudio es muy sencillo, consiste en enviar al laboratorio materia fecal para detectar cantidades mínimas de sangre no visibles a simple vista. Los pólipos y el cáncer pueden ocasionar sangrados mínimos o más manifiestos. Este estudio se recomienda realizar anualmente. Pero los pólipos y el cáncer no son las únicas enfermedades que dan sangrado por lo que si da positivo se debe completar con otros estudios.

La rectosigmoidoscopía permite la visualización del intestino más distal por medio de un instrumento que es como una "manguera" que se coloca por el recto. Permite no sólo ver si no también extraer pólipos o tomar biopsias. No ve la totalidad del intestino. Se aconseja realizar cada cinco años luego de los 50 años.

La asociación de ambos tests permite aumentar la chance de detección. La colonoscopía es similar a la sigmoidoscopía pero valora a todo el colon.

También puede realizarse un colon por enema que consiste en introducir un líquido de contraste por el recto y sacar placas Puede detectar pólipos y cánceres; pero de ser positivo debe completarse la valoración con sigmoidoscopía.