Actualización

Síndrome de muerte súbita del lactante

El síndrome de muerte súbita del lactante es la muerte inesperada de un niño aparentemente sano hasta el momento de acostarlo en su cuna.

Autor/a: Dirección de Maternidad e Infancia del Ministerio de Salud

Indice
1. Desarrollo
2. Bibliografía
3. Grafícos estadísticos
4. La situación en Argentina
5. Una mirada desde el desarrollo del niño

Se llega al  diagnóstico de Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL)  por exclusión, previa investigación de los antecedentes, las circunstancias del evento y/o los estudios post- mortem.  Si bien se conocen los factores de riesgo que se asocian con la producción del SMSL y ciertos cambios fisiopatológicos de esta entidad la causa de la misma es desconocida. El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL) constituye una causa frecuente de defunción en niños de menos de un año de edad en todo el mundo. La gran mayoría de los casos acontecen en lactantes sanos, sin factores de riesgo reconocibles específicos que permitan realizar acciones preventivas efectivas individualizadas o focales en grupos de riesgo.

El SMSL ocurre durante los primeros 12 meses de vida. El 80 % de los casos sucede antes de los 6 meses de vida y es poco frecuente durante el primer mes de vida. Su incidencia máxima es entre los 2 y 4 meses de edad. Se describen muy pocos casos luego de los 12 meses.  La frecuencia del SMSL varía entre 1.5 por mil (Ej.: Nueva Zelanda en 1997) y 0.1 por mil (Holanda en 1997). A pesar de estos factores, limitantes para una acción efectiva en la prevención del SMSL, en la última década se ha reunido considerable evidencia epidemiológica que demuestra la vinculación de la posición en decúbito ventral del niño al dormir como la variable dependiente más importante en la ocurrencia .
El hecho más sorprendente desde el punto de vista epidemiológico ha sido la disminución de la incidencia del  SMSL en más del 50 % en varios países desarrollados luego de campañas para reducir la posición prona (boca abajo) de los lactantes durante el sueño.

En el año 1991, 19 estudios caso-control han reportado una asociación positiva entre la posición prona y el SMSL, con Odds Ratio que oscilaban entre 1,2 y 14,1.
En 1991, el Reino Unido, Nueva Zelanda, Australia y otros países introdujeron campañas nacionales de prevención que sugerían que los bebés saludables no debían dormir en decúbito prono. En el Reino Unido la campaña de educación se llamó: "Back to Sleep" y la posición boca arriba para dormir fue muy fomentada y aceptada. En Australia y en otros países se recomendó la posición supina o de costado durante el sueño de los bebés saludables. Los padres y los cuidadores respondieron a estas campañas con una drástica disminución en la posición prona de los bebés durante el sueño, lo cual se acompañó de una notable disminución en la incidencia del SMSL. En el Reino Unido el número de muertes en cuna disminuyó a la mitad: de novecientos doce en 1991 a cuatrocientos cincuenta y seis  en 1992.

En Nueva Zelanda la incidencia del SMSL disminuyó de 4,1/ 1000 en 1989 a 2,5 / 1000 en 1991 y en Australia la incidencia del SMSL declinó desde 1,9/1000 en 1990 a 1,1/1000 en 1992.  En los Estados Unidos, la Academia Americana de Pediatría recomendó  en 1992 que los bebés sanos debían dormir en una posición no prona hasta los 6 meses d edad. Esto fue reforzado por una Campaña Nacional ( Back to Sleep) en 1994. La incidencia del SMSL disminuyó de 1.1/ 1000 en 1992 a 0.9 / 1000 en 1995 ( una disminución de aproximadamente un 30 %)        

Artículo comentado por el Dr. Edgardo Checcacci, editor responsable de IntraMed en la especialidad de Pediatría.