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Más del 90% de los chicos no hace actividad física fuera de la escuela

Estiles de vida, obesidad, sedentarismo, riesgo cardiovascular.

Noticias médicas

/ Publicado el 17 de noviembre de 2006

Surge de un estudio a alumnos de 10 y 11 años de 80 escuelas. Además, pasan muchas horas frente a la TV o con videojuegos. Y consumen un 15% más de las calorías que precisan, con riesgo de obesidad.

Patricio Downes

El sedentarismo entre los preadolescentes es una de las principales causas de obesidad y la escuela no los ayuda porque la actividad deportiva se reduce a un par de horas semanales de educación física que no cubren las necesidades de movimiento para cuerpos en desarrollo, en chicos que pasan la mayor parte del día ante las pantallas de tevé o de las computadoras. A ello se suma el abuso de comida chatarra.

Más del 90% de los chicos no realiza actividad física extra escolar, según un estudio realizado por el Instituto Internacional de Ciencias de la Vida (ILSI según su sigla en inglés), entre 1.588 chicos de 10 y 11 años de 80 escuelas públicas porteñas y del Gran Buenos Aires. El 96% de los varones y el 92% de las nenas no realizan actividad física programada fuera de clase.

La encuesta estuvo a cargo de un equipo de 30 profesionales, dirigido por un equipo que integran Irina Kovalskys, María José De Gregorio, Vanina Ugalde y Francis Holway, del ILSI Argentina, entre otros.

Además, la media horaria de pantalla para los chicos de jornada simple es de 3,43 horas por día y de 2,44 horas diarias en el caso de los que asisten a una escuela de jornada completa.

También es importante el aspecto nutricional, porque la misma encuesta observó que los chicos consumen un 15% más de calorías que lo recomendado para su edad.

El consumo promedio de los chicos entrevistados es de 2.300 calorías diarias, al mismo tiempo que sus comidas contienen muy pocas fibras y escasas cantidades de frutas y verduras. A la hora de mencionar las frutas, se nota la mayor falencia, porque el 57% admitió que no consume ninguna por día, el 26% sólo una, y apenas el 17% se anima a dos frutas diarias.

Al mayor consumo de calorías se agrega que tienen poca actividad física, ya sea recreativa o deportiva: más de la mitad (el 53,2%) de los chicos encuestados por los investigadores del ILSI no dedica más del 30 al 40 % de su tiempo libre a moverse. Significa que apenas se levantan de una posición cómoda en la cama, el sillón o frente a la computadora. La mayor parte del tiempo la dedican a actividades de pantalla.

Para el profesor de educación física Héctor Ferraro, quien dicta clases en escuelas públicas y privadas porteñas, "lo ideal para compensar la vida sedentaria de hoy son las escuelas deportivas en contra turno". Ferraro contó a Clarín que en la Escuela Santa Cruz, de Almagro, esa actividad ha dado buen resultado con chicos del primario.

En las escuelas primarias el ejercicio físico no supera los dos módulos, también llamados estímulos, de 45 minutos cada uno. "Yo creo que lo ideal es el funcionamiento de las escuelas deportivas, porque posibilitan el acceso también para quienes no tienen recursos y no pueden pagarse por ejemplo, una escuelita de fútbol. Además, es importante el ejercicio de distintos deportes, no limitando el ejercicio a una especialidad única", dijo Ferraro.

"Ya estamos ante una situación de la obesidad como epidemia en la niñez", dijo a Clarín la médica Norma Piazza, vocal del Comité de Nutrición de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP). "Y no se trata de hacer dietas, se trata de que los chicos puedan recuperar la capacidad del juego, de la actividad física, cuando la mayoría de los padres trabaja y por razones prácticas se acude a la comida rápida".

Piazza explicó que hacen falta medidas más amplias, con participación del Estado, porque "es muy difícil enfocar la prevención sólo desde las pautas que pueda dar una familia". Y advirtió que siempre se ha mencionado la enfermedad cardiovascular en los adultos, "pero ahora tenemos que hablar de la enfermedad en la niñez, porque ya encontramos el llamado síndrome metabólico en la infancia, con colesterol elevado, triglicéridos y el colesterol vulgarmente llamado bueno (HDL) muy bajo e hipertensión, entre otros factores".

Los porcentajes coinciden con el resultado de una reciente encuesta del Ministerio de Educación de la Nación acerca de los consumos culturales en chicos y adolescentes, que arrojó una media horaria de entre 2 y 3 horas de permanencia frente al televisor. Según el Programa Escuela y Medios, a cargo de Roxana Morduchowicz, luego de consultar a 3.360 hogares de todo el país, "un chico argentino —de entre 11 y 17 años— pasa aproximadamente 6 horas por día con los medios". Y, al mismo tiempo que mira tevé, el 50% de los chicos hace la tarea, el 30% escucha música, el 10% usa la PC, el 10% habla por teléfono y el 10% lee.

Natación y una dieta sana

"Me pasaba el tiempo viendo telenovelas y comiendo chatarra", contó Camila, una chica de 11 años que este año decidió cambiar de vida cuando llegó de las vacaciones y se sintió muy gorda, con más de 50 kilos. Le pidió ayuda a sus padres, Celia y Juan Carlos Frydman.

Ahora está orgullosa, pesa 11 kilos menos y le anda el pantalón que más le gustaba y el que junto a su mamá Celia Gómez eligió como meta.

"Cuando vine de la playa empecé natación y aprendí a comer mejor. No era que no comía nada. Por ejemplo siempre me gustó ir a McDonald's, y ahora voy, pero me como una hamburguesa, pero dejo el helado y la gaseosa", contó junto a su hermano Santiago (8).

Tampoco se priva de salir con su grupo de teatro, con el que representa "Vacaciones". Su hermano Iván (14) le decía: "Después crecés y adelgazás". Pero ella insistió en ejercitarse, nadar y comer sano.

Sin infraestructura escolar
Oscar Angel Spinelli
ospinelli@clarin.com

No es culpa de la televisión. Tampoco serían responsables del sedentarismo los libros o el ajedrez. Es un problema de oferta cultural y educativa. Las escuelas en este país nunca tuvieron la infraestructura adecuada para promover los deportes. Salvo excepciones, las clases de educación física se reducen a dos o cuatro horas por semana, casi siempre en un patio que apenas puede albergar a todos los chicos de la escuela en los recreos. Y viene de lejos. Hace 40 años era lo mismo. Pocos clubes prestaban sus instalaciones. Igual que ahora. ¿Pero qué tal si se empieza a pensar en incorporar campos de educación física y deportivos a las escuelas? ¿Imposible? Bueno, entonces hablemos de otra cosa.

Pocas horas de clase

En Capital Federal, las 225 escuelas primarias públicas de jornada simple cuentan con dos horas semanales de educación física, y 225 de jornada completa hacen cuatro horas por semana.

En la Provincia de Buenos Aires 1.131.759 alumnos asisten al 1º y 2º ciclo de Educación General Básica. La mayoría asiste a las más de 4.000 primarias de jornada simple donde reciben dos horas semanales de educación física. Y los menos, toman clases en las 600 escuelas de jornada completa que dictan tres horas por semana de educación física. "El problema del sedentarismo aqueja a todos los chicos. Por esa razón dispusimos espacios gratuitos donde resolver esta problemática", advierte la directora de Educación Física de la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense, Silvia García. Son 151 Centros Educativos Complementarios y otros 134 Centros de Educación Física, donde sólo el 11,4% de los alumnos hacen actividad física.