Profesionales de la salud se mostraron preocupados por los problemas que podría traer una mala o deficiente detección de esta enfermedad.
Domingo J. Palmero, médico de planta del Hospital Muñiz, encabezó un trabajo junto a científicos latinoamericanos en el que muestra su preocupación por el diagnóstico y tratamiento de la tuberculosis que se está haciendo tanto en la Argentina como a nivel regional, una enfermedad que está avanzando a pasos agigantados sobre el territorio.
El informe, llamado Pautas latinoamericanas de diagnóstico y tratamiento de la tuberculosis farmacorresistente y publicado en el sitio de la Sociedad Iberoamericana de Información Científica (SIIC), señala que los métodos hoy empleados no permiten una solución definitiva a esta problemática médica y social.
En ese sentido, afirmó que el impacto de la tuberculosis en los más chicos ha sido desestimado. Es por eso que en los menores mal o no diagnosticados la enfermedad se presenta de modo más severo, llegando a desarrollar el tipo TBC miliar (es decir, la tuberculosis diseminada y extrapulmonar).
Palmero explicó que los síntomas de TBC en los niños son inespecíficos, a lo que se suma los malos procedimientos de detección de la enfermedad. Para él, las reglas de predicción carecen de precisión y no son específicas, sobre todo en pacientes con desnutrición o HIV. En ese caso, por ejemplo, sólo 5 de las 17 reglas fueron adaptadas a los pacientes infectados con el virus del sida, y sólo una fue creada especialmente para ellos.
Además, destacó que las cepas resistentes a los tratamientos son seleccionadas mediante esquemas terapéuticos erróneos, fármacos de calidad inadecuada, falta de supervisión terapéutica o la combinación de estos tres factores.
La tuberculosis en América Latina
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los registros de 2005 hablan de 8.811.000 personas con tuberculosis a nivel mundial. De éstos, aproximadamente 320 mil casos pertenecen a América Latina (3,58% del total mundial), lo que corresponde a 63 enfermos cada 100 mil habitantes.
Brasil es el único país de la región que figura entre los de mayor incidencia de tuberculosis en el mundo. Por su parte, Haití es el que tiene mayor proporción de tuberculosis/SIDA.