Los autores, de la Universidad de California, en San Diego, entrevistaron a un grupo de 106 niños y adolescentes de 5 a 18 años que tenían un índice de masa corporal medio de 34,7, así como a sus padres.
Compararon los resultados de las encuestas acerca de aspectos relacionados con la calidad de vida con los de entrevistas realizadas a niños de peso normal, y comprobaron que los obesos tienen 5 veces más probabilidades de experimentar un deterioro de sus funciones físicas. Según los autores, la calidad de vida de los niños y adolescentes obesos fueron más bajos en aspectos físicos, psicosociales, emocionales, sociales y escolares, y su calidad de vida en relación con la salud fue similar a la de pacientes jóvenes con cáncer.