Introducción. La enfermedad cardiovascular (ECV) es la principal causa de muerte de los pacientes con esquizofrenia y se relaciona, en parte, con una mala prevención primaria y secundaria. Ante la ausencia de datos sobre colesterol no-HDL (lipoproteína no de alta densidad) en los estudios sobre antipsicóticos y el creciente interés sobre la prevención del riesgo de ECV en pacientes con enfermedades mentales, en este estudio se ha cuantificado el cambio de las concentraciones del colesterol no-HDL, un factor de predicción de la ECV2, mediante un análisis agrupado de los resultados de ensayos clínicos comparativos entre aripiprazol y olanzapina.
Métodos. Análisis post hoc agrupado y exploratorio de tres estudios clínicos comparativos de olanzapina y aripiprazol en pacientes con esquizofrenia; el primero de estos estudios en un ensayo aleatorizado, doble ciego y de 26 semanas de duración (CN 138-002); el segundo un estudio aleatorizado y de diseño de doble ciego de 52 semanas (CN 138-003 y el tercero, un estudio de diseño abierto también de 52 semanas (estudio CN 138-047 ampliado). El colesterol no HDL se calcula como el colesterol total menos el colesterol HDL en muestras de las semanas 6, 12 ,26 y 52. Las comparaciones estadísticas se efectúan con un análisis ANCOVA y UOA (última observación arrastrada).
Resultados. En todas las valoraciones se documenta una reducción significativa (p‹0,0001) de la concentración media respecto a la basal del colesterol no HDL en los pacientes tratados con aripiprazol, mientras que los pacientes que reciben olanzapina muestran un incremento significativo (p‹0,0001) de dichas concentraciones medias del colesterol no HDL. El cambio medio del colesterol no HDL entre los pacientes tratados con aripiprazol frente a olanzapina alcanza significación estadística desde la semana 6 (-16,1 mg/dl y +10,4 mg/dl, respectivamente) y se mantiene en las semanas 12, 26, y 52 (p‹0,0001, todas las valoraciones).
Conclusión. La mejoría precoz y mantenida del colesterol no HDL advertida en los pacientes tratados con aripiprazol, en comparación con su reducción en los pacientes que reciben olanzapina, sugiere que el tratamiento antipsicótico puede influir en los riesgos de ECV, dependiendo dicha influencia de la medicación individual elegida. Estos resultados hacen hincapié en la necesidad de conocer las implicaciones a largo plazo sobre la salud cuando se inicia un tratamiento antipsicótico.
Trabajo incluido en la 161ª Reunión anual de la Asociación Americana de Psiquiatría.