Avanzada investigación

Nueva tecnología para detectar E. coli

Un grupo de científicos se encuentra desarrollando un sensor manual capaz de señalar la presencia de E. Coli y otros gérmenes en comidas y bebidas en cuestión de minutos.

Autor/a: IntraMed

Fuente: Cornell University

El dispositivo se comenzó a analizar durante la década pasada, cuando varios casos fatales de infección por E. Coli ocurrieron en los EEUU.

En 1999 una niña y un hombre mayor fallecieron a causa de ese germen y otras 1.000 personas resultaron infectadas, probablemente a causa de haber ingerido alimentos o agua contaminadas.

"Este aparato puede evitar que mucha gente se enferme, además de ahorrar el dinero utilizado para pagar tratamientos médicos", declaró el químico Richard Durst de la Cornell University.

Las pruebas de campo del nuevo aparato comenzarán durante el mes de julio: el aparato tarda 8 minutos en detectar la presencia letal de E. Coli 0157:H7.

Cada año, aproximadamente 73.000 norteamericanos enferman a causa de ingerir carne semi-cocida y alrededor de 60 personas mueren (según información proporcionada por el Centers for Disease Control and Prevention -CDC- ). Además, 2.100 personas son hospitalizadas por intoxicación y, en la mayoría de los casos, la E. Coli es la culpable.

La E. Coli 0157 fue identificada en 1982 luego de que casi 25 personas se intoxicaran al comer hamburguesas contaminadas. Desde aquel momento, se han reportado infecciones en más de 30 países.

La bacteria puede contaminar la carne durante la faena y el empaque, usualmente por su presencia en las heces del ganado. La gente que consume leche o jugos sin pasteurizar y agua no clorada también corre riesgo de infectarse.

Los tests actuales para hallar E. Coli fueron desarrollados por Lansing, Mich y se asemejan a los utilizados para determinar el embarazo: cambian de color en presencia de la bacteria. Pero los resultados pueden tardar un día completo en aparecer. Durante ese tiempo, sugieren los científicos, miles de personas pueden haber sido expuestas al agente en un evento público, o un alimento contaminado puede ser distribuido entre cientos de negocios.

"Lo que se necesitaba era un test rápido y muy sensible para detectar E. Coli", dice Durst. "La rapidez es importante para obtener un resultado preventivo, y no solo diagnóstico".

Mike Doyle, microbiólogo especialista en alimentos de la Universidad de Georgia, que no formó parte del equipo de investigación, indica que se necesitan más pruebas para garantizar que el aparato desarrollado por la Cornell University pueda detectar la presencia de E. Coli mejor que los métodos tradicionales.

"Si este procedimiento no es tan bueno como el tradicional, se corre el riesgo de  obtener falsos negativos que darán una falsa sensación de seguridad", dijo.

En la actualidad se utilizan 1.700 procesadores que inspeccionan -en nombre del Departamento de Agricultura de los EEUU-  menos del 2% de la producción total de carne de aquel país. La legislación vigente dictamina que, en presencia de E. Coli, toda la producción debe destruirse.

El dispositivo desarrollado por la Cornell University tiene el tamaño de un reproductor de micro casetes y utiliza tiras de anticuerpos que se vuelven rojas en presencia de la bacteria. Según Durst, el aparato podría ser utilizado por inspectores en las plantas de empaque de carne o en restaurantes, cocinas o eventos públicos.

De hecho, el adminículo puede detectar altas cantidades de E. Coli en apenas 8 minutos. Si la cantidad es muy baja, se necesitarán al menos 4 horas para detectarla.