Muy a menudo, los dientes que necesitan ser endodónticamente tratados han sufrido una extensa destrucción debido a caries, traumatismos, fracturas, etc. y por lo tanto la estructura remanente es muy débil.
En tales casos, es imprescindible reconstruir o reforzar las paredes debilitadas en forma previa al tratamientos de conducto.
Entonces es necesario, restaurar la corona natural del diente, mínimamente de forma parcial, para alcanzar los siguientes objetivos:
· Prevenir las fracturas de las paredes, lo cual si ocurriese complicaría o haría imposible el tratamiento endodóntico, o la restauración final.
· Devolver a la pieza dentaria a su función normal o habitual, lo más parecida posible.
· Mejorar la estética, que a menudo es el aspecto más importante para los pacientes.
· Prevenir la filtración, lo cual recontaminaría el conducto, o bien podrían difundirse medicamentos hacia fuera.
· Permitir que la utilización de clamps y goma dique, para alcanzar el aislamiento absoluto del campo operatorio.
Los anillos de cobre eran los dispositivos usados generalmente para resolver estas metas, pero tenían serias desventajas en lo referente a la estética y eran siempre potenciales irritantes de los tejidos blandos.
Casos clínicos
CASO 1 Se presenta una mujer, de 17 años de edad, con lesiones de caries muy importantes en sus dientes 1.1 y 2,1. El incisivo central izquierdo (2,1) necesitó el tratamiento de conducto.
Varios autores recomiendan la utilización de pernos o postes radiculares, sólo cuando es necesaria la retención para la restauración coronaria, mientras que otros autores han recomendado la resina compuesta basada en la odontología adhesiva para reforzar las estructuras dentales remanentes; cuando se utiliza esta técnica, la restauración final queda incorporada como parte de la misma.
Además, de esta manera la restauración definitiva se realizará anterior al tratamiento de conducto.
La misma técnica y material de obturación serán utilizados para llenar el acceso endodóntico después de que se termine el tratamiento.
Lo que se observa previo a la restauración final y definitiva son los puntos de conos de gutapercha, apenas para mantener el acceso endodóntico mientras que los procedimientos restaurativos son terminados. El acceso endodóntico, la extirpación pulpar y la irrigación, fueron los procedimientos endodónticos que habían sido realizados hasta ese momento.
El efecto de férula que es dispensado al remanente coronario por la restauración adhesiva es lo que mantiene a las paredes unidas y disminuye las posibilidades de su fractura.
CASO 2. - Se presenta una mujer de 52 años, con una restauración fracturada de amalgama de larga data, además de presentar caries en su primer premolar superior derecho (1,4).
El tratamiento indicado fue una biopulpectomía total, pero la restauración adhesiva de una clase V debido a una lesión de abracción, era obligatoria de realizar en forma previa al tratamiento endodóntico, para reforzar la pared bucal y así evitar el efecto de cuña y permitir que el clamps pueda ser firmemente asegurado.
Siguiendo esto, todas las paredes de la cavidad fueron reforzadas y el remanente de pared distal fue reconstruido con dentina artificial, a saber composite, y se utilizó un agente adhesivo de última generación.
El tratamiento de conducto fue concluido y después de que los conductos fueran sellados, los postes o pernos de titanio pasivos fueron cementados y se construyó un núcleo de resina de composite.
La corona fue entonces preparada para recibir una incrustación de cerámica a ser colocada con un cemento adhesivo, porque muchos autores han sugerido que la cobertura oclusal es la mejor manera de reforzar los dientes posteriores endodónticamente tratados.
Todos sus márgenes fueron ajustados contra la estructura del diente, dejando los márgenes del núcleo de resina anteriores cubiertos totalmente por la incrustación.
Caso 3.- Se presenta a la consulta una mujer de 59 años, con una pérdida muy extensa de estructura dentaria en su primer molar inferior derecho (4,6). Los tejidos con caries fueron removidos, manteniendo todas las estructuras posibles que eran del esmalte, incluso el esmalte socavado que había perdido su soporte de dentina sana.
Los tejidos pulpares son eliminados parcialmente y los pins dentinarios se colocan en dentina sana, usando el aislamiento relativo.
La odontología adhesiva y los pins dentinarios fueron utilizados en este caso para reforzar las paredes dentarias restantes, tanto para reforzar las que fueron perdidas, como para lograr el aislamiento absoluto del campo operatorio.
El punto de la gutapercha se coloca en el conducto para evitar que tanto el adhesivo como la resina adhesiva fluyan en el conducto distal mientras que las paredes fueran reconstruidas.
Después de que el relleno endodóntico fuera logrado, se realizó un núcleo con pernos o postes radiculares pasivos y se aplicó la odontología adhesiva.
Entonces, la porción coronaria fue preperada para recibir una corona metálica, con sus márgenes ajustados a la estructura dentaria sana.