El transplante de órganos sólidos es utilizado como terapéutica de varias enfermedades agudas y crónicas. Con el transplante comúnmente se establece inmunosupresión usando regimenes combinados de drogas para evitar el rechazo. Las drogas inmunosupresoras más usadas son: corticosteroides, azatioprina, ciclosporina A, tacrolimus, rapamicina, y micofenalato mofetil. El uso de éstas drogas por largos períodos crea un estado en el que la vigilancia inmunológica se deteriora y se ha demostrado un incremento en la incidencia de infección y malignidad.
El objetivo de éste estudio fue determinar enfermedades mucosas y cutáneas en una larga serie de niños luego de transplantes de riñones, corazón, hígado y pulmones.
El estudio incluyó a 217 pacientes, menores de 18 años al momento del transplante. Comprendían 131 varones y 86 mujeres (los órganos transplantados fueron: 166 riñón, 28 corazón, 19 hígado, 2 hígado y riñón, 1 riñón y corazón, 1 pulmón). El seguimiento varió de 1 mes a 28 años, se les examinaba la piel cada 6 meses.
La mayoría de los pacientes (109, 50.2%) estaban tratados con triple terapia, una combinación de ciclosporina A, azatioprina, prednisona.
Un total de 193 pacientes mostraron al menos una enfermedad cutánea; 149 presentaron más de una. Las infecciones más comunes de la piel fueron verrugas (24.4%), pitiriasis versicolor (20.7%), foliculitis (12.9%), intertrigo (6.5%); los efectos adversos a drogas más comunes fueron, hipertricosis (69.6%), acné esteroideo (39.6%), hiperplasia gingival (29%) y xerosis severa (20.7%). Dos pacientes (0.9%) desarrollaron cáncer de piel no melanoma.
Este estudio resume las principales complicaciones cutáneas en pacientes transplantados en la niñez y resalta la necesidad del seguimiento dermatológico regular de éstos pacientes.
¿Qué se sabe sobre el tema?
Existen pocos datos disponibles sobre trastornos cutáneos en pacientes pediátricos con transplante de órganos sólidos. Con el transplante debe establecerse inmunosupresión utilizando combinación de drogas, para evitar el rechazo del órgano transplantado. Estas administradas a largo plazo crean un deterioro en la vigilancia inmunológica que ha sido asociado con incremento de la incidencia de infección y malignidad.
¿Qué aporta a la práctica clínica?
Este estudio desarrolla las principales complicaciones cutáneas en niños transplantados y destaca la importancia del seguimiento dermatológico de éstos pacientes, por las complicaciones cutáneas que pueden presentar.