Por Amy Norton
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un nuevo estudio revela que los pacientes en los que se demora un año la cirugía de próstata obtienen los mismos resultados que aquellos operados inmediatamente.
Los autores de un estudio realizado en Suecia analizaron información sobre 2.566 pacientes con cáncer de próstata y no hallaron evidencias de que el retraso de la cirugía afectara su salud.
En esos pacientes, los tumores no se habían diseminado ni había signos de una mayor agresividad tumoral que en los hombres operados rápidamente después del diagnóstico.
Y la supervivencia a largo plazo fue casi la misma, según publica Journal of Urology. En ocho años, falleció el 0,9 por ciento de los hombres en los que se había demorado la cirugía, comparado con el 0,7 por ciento del otro grupo.
"Los resultados demuestran que ante el diagnóstico de un tumor prostático de bajo riesgo y localizado, no hay urgencia en decidir el mejor tratamiento", dijo a Reuters Health el autor principal del estudio, doctor Benny Holmstrom, del Hospital Gavle de Suecia.
El científico agregó que el estudio se suma a las evidencias de que los pacientes pueden optar de manera segura por la llamada "vigilancia activa", que es cuando el médico supervisa la enfermedad con análisis regulares de PSA, exámenes rectales y biopsias prostáticas.
Esto es importante porque cada vez más médicos optan por la vigilancia activa para el manejo del cáncer de próstata. En general, esta "espera vigilada" surge como una opción cuando el cáncer está limitado a la próstata y tiene bajo riesgo de avanzar rápidamente.
Ese "bajo riesgo" se determina mediante un nivel relativamente escaso del llamado PSA (antígeno prostático específico) en la sangre y la ausencia de anormalidades en el tumor, que indicarían una mayor virulencia tumoral.
Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, la mitad de los más de 190.000 estadounidenses hombres con el cáncer diagnosticado en el 2009 entraría en la categoría de "bajo riesgo".
El equipo de Holmstrom revisó los datos del Registro Sueco de Oncología e identificó a 2.344 hombres operados inmediatamente después de recibir el diagnóstico de un tumor de bajo riesgo entre 1997 y el 2002, y a 222 hombres operados después de un período de vigilancia activa.
A todos se les realizó una prostatectomía radical, que es cuando se extirpa toda la glándula prostática y una parte del tejido que la rodea.
La cirugía en el primer grupo demoró alrededor de tres meses a partir del diagnóstico, mientras que en el segundo grupo, la espera fue de unos 19 meses.
En general, el equipo no halló diferencias significativas entre los dos grupos en cuanto a las anormalidades tumorales al momento de la cirugía que pudieran alterar el pronóstico. Y, en ocho años, tampoco varió significativamente la supervivencia.
FUENTE: Journal of Urology, online 18 de agosto del 2010