El 90% puede presentar la asociación

Rinitis alérgica, factor clave en el pronóstico del asma

Neumólogos y alergólogos se reunieron en Barcelona para abordar la relación entre ambas enfermedades.

La rinitis alérgica constituye un factor clave en el pronóstico del asma, especialmente si se mide en términos de calidad de vida, según manifestaron especialistas participantes en la reunión internacional "El Asma a Debate", organizada por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), en colaboración con MSD, que se celebró en Barcelona con el objetivo de ofrecer información de máxima actualidad en relación al asma bronquial desde un punto multidisciplinar.

Los especialistas señalaron que el 90% de los pacientes asmáticos puede presentar también rinitis alérgica, por lo que los médicos deben tener muy en cuenta la relación entre ambas enfermedades a la hora de establecer un diagnóstico y su posterior tratamiento. En este sentido, apuntaron que las posibilidades de mejora pasan por la necesidad de reconocer la rinitis alérgica como un factor claro de agravamiento del asma y por el imperativo de tener una perspectiva clínica conjunta de ambas enfermedades.

Según el Dr. Julio Ancochea, presidente de la SEPAR, estos temas responden al interés actual de los clínicos. "Es muy importante que se aborden de una forma multidisciplinar, y que se integren a todas las especialidades implicadas en el diagnóstico, tratamiento y control del asma", destacó.

Por su parte, el Dr. Santiago Quirce, jefe del Servicio de Alergia del Hospital La Paz de Madrid, señaló que "la rinitis alérgica es una enfermedad que progresa y que tarde o temprano puede acabar afectando a toda la vía respiratoria. Concretamente, hasta un 40% de los pacientes que sufren rinitis alérgica acaban desarrollando asma". 

"Muchos pacientes que comienzan la estación primaveral sólo con síntomas de rinitis alérgica a medida que aumentan los niveles de polen y las condiciones climatológicas son más favorables a una mayor concentración, pueden acabar presentando síntomas de asma", subrayó el Dr. Quirce.

Según los especialistas, este hecho demuestra la existencia de un mecanismo inflamatorio común que puede afectar por igual a las vías respiratorias superiores (nariz) e inferiores (pulmones y bronquios). Entre los elementos comunes y claves en la fisiopatología de ambas enfermedades destacan una serie de mediadores inflamatorios, los leucotrienos, cuyo bloqueo puede controlar los síntomas asociados clásicamente tanto al asma como a la rinitis alérgica.