El dispositivo en forma de anillo aprobado por la FDA ofrece un método de evaluación continua del síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS) fuera del laboratorio. Captura señales de oximetría de pulso, fotopletismografía y acelerometría.
Los estudios clínicos de validación muestran una correlación coherente con los estándares de la polisomnografía de laboratorio (PSG), así como elevados niveles de cumplimiento por parte de los pacientes usuarios. Ello sugiere un papel creciente y un aumento en la adopción de este tipo de tecnologías en el diagnóstico y seguimiento a largo plazo del SAOS.
Este síndrome se caracteriza por episodios recurrentes de obstrucción parcial o total de las vías aéreas superiores durante el sueño. Su prevalencia estimada en adultos es del 9–38 %. Tradicionalmente, la polisomnografía de laboratorio (PSG) fue considerada el “estándar de oro”, pero su costo, infraestructura requerida y la variabilidad intermitente de la medición puntual limitan su aplicabilidad en el seguimiento longitudinal y en áreas con escasos recursos.
El dispositivo recientemente aprobado consiste en un anillo ajustable, que incorpora un sensor de oximetría de pulso de grado médico, fotopletismografía (PPG) y un acelerómetro triaxial. Se sincroniza con una aplicación móvil que registra datos de saturación de oxígeno (SpO₂), frecuencia cardíaca y movimientos durante toda la noche.
El sistema emplea algoritmos de redes neuronales en la nube para estimar el índice de eventos respiratorios (Ring-REI) y el tiempo total de sueño (Ring-TST), dos parámetros fundamentales para la clasificación de la severidad del SAOS.
En un estudio de validación sobre el dispositivo, que fue publicado en el Journal of Clinical Sleep Medicine, hace ya varios años, el Belun Ring Platform alcanzó una correlación de r=0,894 (p< 0,001) entre Ring-REI y el AHI de PSG; además, la sensibilidad y la especificidad para detectar AHI ≥ 15 eventos/hora fueron 85 % y 87 %, respectivamente, con valores predictivos positivo y negativo de 88 % y 83 %.
El Ring-TST mostró correlación r=0,945 (p< 0,001) con el tiempo total de sueño de la PSG. Aunque, pese a su buena precisión global, se observó una tendencia a sobrestimar eventos en AHI < 15 y subestimar en AHI > 15.
En comparación con otros dispositivos y métodos de medición, podemos notar lo siguiente:
- Polisomnografía en laboratorio (PSG): es un registro multicanal completo (EEG, ECG, flujo aéreo, esfuerzo respiratorio), pero representa solo una noche puntual y es susceptible a la variabilidad, sin mencionar su elevado costo.
- Dispositivos de prueba domiciliaria (HSAT, tipo 3): miden un mínimo de 4 canales (flujo, movimiento torácico, oximetría, frecuencia cardíaca). Su adopción ha crecido, aunque requieren formación del paciente y pueden resultar incómodos.
- Wearables comerciales (Oura Ring, Apple Watch): brindan seguimiento continuo de bioseñales, pero carecen de aprobación para diagnóstico clínico del SAOS.
A su favor, este nuevo dispositivo reduce la dependencia de los laboratorios de sueño. No obstante, al carecer de EEG, no discrimina fases de sueño ni microdespertares con precisión.
Podría aplicarse en poblaciones de ubicación remota o con difícil acceso a los laboratorios de PSG. Facilitaría la extensión del cribado en áreas rurales o con limitaciones de recursos. A su vez, volvería más práctica la evaluación de eficacia de los CPAP y de los dispositivos de avance mandibular. En cuanto a epidemiología, permitiría recolectar datos escalables de grandes problaciones.