Los urocultivos tienen una influencia significativa en el tratamiento de sospechas de infecciones del tracto urinario (ITU) y son las pruebas microbiológicas más comunes en entornos ambulatorios.

Se encontró que más de la mitad de los urocultivos estaban contaminados y a 1 de cada 5 de los pacientes se les prescribió un antibiótico.

Si bien los resultados de los urocultivos suelen ser necesarios para la confirmación de un diagnóstico de infección urinaria, los médicos suelen recetar antibióticos antes de recibir los resultados.

Esto representa una amenaza para la atención del paciente, porque aunque los urocultivos son el estándar de oro para un diagnóstico de UTI, pueden contaminarse fácilmente durante el proceso de recolección y los médicos a menudo necesitarán hacer ajustes al tratamiento una vez que reciban los resultados de las pruebas.

Para determinar la prevalencia de cultivos contaminados, junto con los predictores y el uso de antibióticos asociados con urocultivos contaminados, los investigadores analizaron datos de 2 clínicas de atención primaria de la red de seguridad para adultos.

• El estudio incluyó a 1.265 pacientes y encontró que, de ellos, 264 no tenían crecimiento de cultivo, 694 estaban contaminados, 159 tenían recuentos bajos de crecimiento y 148 tenían recuentos altos de crecimiento.
   
• Hallazgos adicionales mostraron que de los 694 con cultivos contaminados, a 153 se les prescribió un antibiótico y de los 264 que no mostraron crecimiento del cultivo, a 36 se les prescribió un antibiótico.

Este estudio demuestra que más de la mitad de los urocultivos tienden a estar contaminados y que 1 de cada 5 pacientes fue tratado con un antibiótico.

Es casi seguro que la reducción de la contaminación de los urocultivos proporcionará una mejora en la atención al paciente, ya que los registros más precisos son relevantes para el manejo de cualquier episodio futuro de ITU.