En un seguimiento de 10 años

La viabilidad miocárdica no predice el beneficio de la revascularización

Prueba de viabilidad miocárdica en pacientes con insuficiencia cardíaca isquémica

Autor/a: Julio A. Panza, M.D., Alicia M. Ellis, Ph.D., Hussein R. Al-Khalidi, Ph.D., Thomas A. Holly, et al.

Fuente: Myocardial Viability and Long-Term Outcomes in Ischemic Cardiomyopathy

En un seguimiento de 10 años, la viabilidad miocárdica no predice el beneficio de la revascularización o la mortalidad.

Los cardiólogos hemos vivido durante mucho tiempo con la idea de que la evaluación de la viabilidad miocárdica debe informar las decisiones sobre la revascularización, particularmente en pacientes con miocardiopatía isquémica, pero algunos estudios han cuestionado esta suposición razonable.

En un subestudio del ensayo STICH (que comparó la terapia médica sola con el injerto de derivación de la arteria coronaria [CABG] en pacientes con enfermedad de la arteria coronaria y fracción de eyección ventricular izquierda [FEVI] de ≤35%; NCT00023595), la presencia de viabilidad miocárdica no fue asociado con un beneficio de supervivencia de CABG en una mediana de seguimiento de 5.1 años.

Los investigadores ahora han analizado las asociaciones de viabilidad miocárdica con la función del VI y los resultados en una mediana de seguimiento de 10.4 años.

De los 1212 pacientes inscritos en STICH, 601 se sometieron a pruebas de viabilidad miocárdica, de los cuales el 19% fueron clasificados como no viables.

La incidencia de muerte a los 10 años no difirió significativamente entre pacientes con o sin viabilidad miocárdica. CABG no fue más efectivo para pacientes con viabilidad que aquellos sin viabilidad.

La FEVI se midió en 318 participantes al inicio y a los 4 meses. Los pacientes con viabilidad miocárdica tuvieron un aumento significativo en la FEVI a los 4 meses, mientras que aquellos sin viabilidad no. La mortalidad no se correlacionó con el cambio de FEVI.

Conclusiones

  • Los hallazgos de este estudio no respaldan el concepto de que la viabilidad miocárdica se asocia con un beneficio a largo plazo de CABG en pacientes con miocardiopatía isquémica.
     
  • La presencia de miocardio viable se asoció con una mejora en la función sistólica del ventrículo izquierdo, independientemente del tratamiento, pero dicha mejora no se relacionó con la supervivencia a largo plazo.

Comentario

Este estudio se suma a las contribuciones previas de los investigadores. En esta población, la viabilidad miocárdica no determinó la probabilidad de beneficio de la revascularización quirúrgica. Además, el cambio en la FEVI, un resultado sustituto, no se correspondía con el beneficio.

Necesitamos estudios más amplios para estar seguros de estos hallazgos. Sin embargo, hasta que las personas puedan demostrar el valor de las pruebas de viabilidad miocárdica en pacientes con miocardiopatía isquémica, debemos suspender el uso de estas pruebas para pacientes similares para informar las decisiones.