Prólogo
Esta guía es un valioso instrumento de trabajo para todo el personal que se desempeña en las redes de salud de los países de América Latina. Describe las orientaciones básicas y fundamentales más actualizadas para el diagnóstico y el tratamiento de la tripanosomiasis americana o enfermedad de Chagas, de acuerdo con la evidencia publicada a la fecha, que hoy la Organización Panamericana de la Salud (OPS) pone en manos de todos los interesados.
El trabajo, realizado por un equipo de especialistas en enfermedad de Chagas, en coordinación con expertos en la metodología conocida como GRADE (siglas en inglés de Grading of Recommendations Assessment, Development and Evaluation),brinda las mayores garantías y credibilidad científica para ofrecer, a los trabajadores de la salud y a los pacientes, un manejo clínico que se asienta en la evidencia y en los conocimientos más sólidos y actuales.
La enfermedad de Chagas es una enfermedad infecciosa desatendida, que padecen entre seis y ocho millones de personas en las Américas. Las estimaciones actuales indican que cada año se producen unos 28.000 casos agudos nuevos, y cerca de 65 millones de personas viven en riesgo permanente de contraer la enfermedad por transmisión vectorial, además del riesgo de transmisión sanguínea, congénita y alimentaria.
Por estas razones, la OPS reconoce que existen necesidades importantes en cuanto a incrementar el acceso, la calidad y la cobertura de la atención en salud dentro de los sistemas nacionales, principalmente en la red primaria de servicios.
Esta guía es, sin lugar a dudas, un significativo aporte para la formación del personal de salud novel. Esperamos que contribuya efectivamente a la capacitación y actualización en servicio de todo el personal de salud, tanto del sector público como del sector privado, y consiga estandarizar los conocimientos y procedimientos necesarios en materia de diagnóstico y tratamiento de esta parasitosis endémica.
La elaboración de esta guía se suma al cumplimiento de los compromisos que, en relación con el Chagas, se establecieron en la Resolución 9 del 55º Consejo Directivo de la OPS de 2017: Plan de Acción para la Eliminación de las Enfermedades Infecciosas Desatendidas y Acciones Post-Eliminación, 2016-2022.
Dr. Roberto Salvatella
Asesor Regional de la Enfermedad de Chagas
Unidad de Enfermedades Desatendidas, Tropicales y Transmitidas por Vectores
Departamento de Enfermedades Transmisibles y Determinantes Ambientales de la Salud
Organización Panamericana de la Salud
Resumen ejecutivo
Justificación
La enfermedad de Chagas o tripanosomiasis americana está causada por el protozoo flagelado Trypanosoma cruzi, transmitido principalmente (más de un 80% de las infecciones registradas) por medio de insectos hemípteros, los triatominos que reciben distintas denominaciones populares en las diferentes regiones de América: “vinchucas”, “pitos”, “chirimachas”, “kissing bugs”, etc.
Dentro de esta subfamilia de insectos hematófagos, la mayoría de casos de la enfermedad de Chagas son atribuibles a las siguientes especies de hábitos domiciliarios: Rhodnius prolixus, Triatoma dimidiata y Triatoma infestans.
Otras vías de transmisión son: la vía transfusional, por medio de transfusiones de sangre de donantes infectados por T. cruzi (cerca del 20% de las infecciones; cuando no existe tamizaje universal de donantes para descartar Chagas en bancos de sangre); la congénita transplacentaria, que se registra en el 2% a 6% de los neonatos de gestantes infectadas; la digestiva, por consumo de alimentos contaminados por T. cruzi; y otras posibles como el trasplante de órganos, los contactos accidentales con ciclos silvestres zoonóticos y los accidentes de laboratorio.
Con una incidencia anual de 28.000 casos en la Región de las Américas, se estima que la enfermedad de Chagas afecta a unos seis millones de personas y provoca cada año cerca de 12.000 muertes (45.000 en la década de 1980 y 23.000 en la de 1990). Se calcula que alrededor de 65 millones de personas corren el riesgo de contraer la enfermedad. Las estimaciones recientes sobre la carga de la enfermedad de Chagas en Latinoamérica indican que genera un costo en salud aproximado de 500 millones de dólares de los Estados Unidos y una pérdida anual de 770.000 años de vida por muerte prematura o pérdida de años productivos por discapacidad (AVAD).
Si bien los avances en prevención y control han sido importantes, la atención médica de las personas infectadas por T. cruzi ha estado rezagada por muchos años, en función de las dificultades diagnósticas y terapéuticas que esta parasitosis sistémica ha entrañado.
Es necesaria una guía que, adoptando la evidencia como fuente de interpretación, detalle la situación que actualmente caracteriza al diagnóstico y tratamiento de la tripanosomiasis americana.
Objetivos
Esta guía está enfocada en emitir recomendaciones para el diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad de Chagas, como infección por Trypanosoma cruzi, agente protozoario de una parasitosis sistémica.
Metodología
La presente guía de práctica clínica fue confeccionada siguiendo los métodos de elaboración de guías de la OMS (5). De forma general, se conformó un grupo desarrollador multidisciplinario compuesto por expertos temáticos, epidemiólogos, metodólogos y usuarios. Dado que no se identificaron guías susceptibles de ser adaptadas, la guía se desarrolló de novo.
Se realizaron búsquedas de revisiones sistemáticas y estudios primarios hasta agosto de 2017, en bases de datos electrónicas (PubMed, EMBASE, Cochrane) y mediante búsqueda manual. Posteriormente, se elaboró la síntesis y los perfiles de evidencia utilizando el enfoque GRADE (Grading of Recommendations Assessment,
Development and Evaluation).
Las recomendaciones fueron graduadas en un panel de expertos en enfermedad de Chagas. La guía fue evaluada por pares temáticos y metodológicos. Todos los participantes del panel y del grupo desarrollador firmaron una declaración de conflicto de intereses, los cuales fueron analizados por la coordinación de la guía.
Recomendaciones
La presente guía provee recomendaciones de diagnóstico y tratamiento para pacientes adultos y pediátricos. Las siguientes recomendaciones conciernen a individuos con:
1) Sospecha de enfermedad de Chagas.
2) Exposición a la enfermedad de Chagas.
3) Diagnóstico de enfermedad de Chagas crónica.
4) Diagnóstico de enfermedad de Chagas aguda.