Beber en exceso

Las mujeres están logrando la igualdad en un hábito dudoso: la bebida

Las mujeres también están cerrando la brecha respecto a los problemas de salud por el consumo de alcohol

Fuente: MedlinePlus

Las mujeres han logrado importantes avances en la igualdad con los hombres, pero una nueva investigación muestra que se están haciendo iguales en una forma que podría ser nociva: la bebida.
Ahora las mujeres están casi al mismo nivel que los hombres respecto al consumo de alcohol y los efectos nocivos que la bebida tiene para la salud, encuentra una revisión mundial.

Históricamente, los hombres han sido mucho más propensos que las mujeres a beber alcohol, y a beber tanto que afecte su salud. Estudios anteriores han sugerido una diferencia de hasta doce veces entre los sexos, señalaron los investigadores.

Datos recientes sugieren que esa brecha se ha cerrado. Las mujeres de todo el mundo son ahora casi igual de propensas que los hombres a beber y a beber en exceso y de forma nociva, apuntó el investigador líder, Tim Slade, epidemiólogo del Centro Nacional de Investigación sobre las Drogas y el Alcohol de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia.

"No podemos seguir pensando en el consumo del alcohol y en los daños relacionados con el alcohol como problemas que solo afectan a los hombres", planteó Slade.

Para seguir las tendencias en la bebida entre los sexos, Slade y sus colaboradores reunieron datos de más de cuatro millones de personas que participaron en 68 estudios internacionales. Los estudios fueron publicados entre 1980 y 2014. Incluían datos recolectados entre 1948 y 2014, y representaban a personas nacidas incluso en 1891. Los investigadores se enfocaron en tres categorías: cualquier consumo de alcohol, el consumo excesivo, y los problemas de salud y sociales relacionados con la bebida.

Los hombres nacidos entre 1891 y 1910 eran el doble de propensos que sus pares de sexo femenino a beber alcohol. Las personas nacidas entre 1991 y 2000 eran más o menos igual de propensas a beber, encontraron los investigadores.

En los mismos periodos, la brecha sexual respecto al hecho de beber en exceso se redujo de tres veces más alta para los hombres a 1.2 veces. La brecha sexual en los daños asociados con la bebida se redujo de 3.6 más alta para los hombres a 1.3 veces, reportaron los investigadores.

Tras tomar en cuenta el sesgo potencial, los investigadores concluyeron que la brecha sexual en la bebida se redujo en un 3.2 por ciento con cada generación sucesiva de cinco años, pero de la forma más marcada entre los que nacieron a partir de 1966.

No hay un solo motivo por el que más mujeres estén bebiendo, dijo Slade. Es probable que el consumo de alcohol se haya hecho más socialmente aceptable para las mujeres a medida que se han sumado a la fuerza laboral, que han ingresado más en la educación superior, y que se han hecho más independientes en el aspecto financiero, planteó.

El Dr. Victor Karpyak, investigador sobre el alcohol en la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota, se mostró de acuerdo en que la evolución social parece haber tenido un rol en esta tendencia.

"Es algo que influye sobre todo en el acceso al alcohol y en las decisiones que las mujeres de distintas sociedades toman sobre si pueden beber, sobre si pueden beber en público, sobre si pueden beber en compañía de los hombres, y sobre si mostrar señales de intoxicación es aceptable para las mujeres", apuntó Karpyak.

Paul Rinaldi, director del Instituto de la Adicción de Mount Sinai West en la ciudad de Nueva York, dijo que a las mujeres también podría tentarle beber para gestionar la presión que sienten de ser "súper mujeres", manejando tanto una carrera como la vida familiar.

"Sigue habiendo presión para que las mujeres que trabajan lo hagan todo", comentó Rinaldi. "Creo que de verdad sienten presión de hacer malabarismos de una forma que es distinta para los hombres".

Pero Rinaldi añadió que las estadísticas más antiguas podrían representar pobremente el consumo de alcohol de las mujeres, dado que muchas mujeres "bebían a escondidas" antes de que se hiciera socialmente aceptable.

Con el aumento en el consumo de alcohol entre las mujeres, las autoridades de salud pública deben aumentar las intervenciones para el alcohol en las mujeres adultas jóvenes, sobre todo dado que hay una variedad tan amplia de problemas de salud asociados con la bebida, apuntó la Dra. Geetanjali Chander, profesora asociada de medicina de Johns Hopkins Medicine, en Baltimore.

Las mujeres en la veintena y la treintena (la "edad de máxima fertilidad") son más propensas a tener un hijo afectado por el trastorno alcohólico fetal, y a desarrollar enfermedad hepática y los cánceres asociados con el consumo de alcohol, advirtió Chander.

"Las mujeres experimentan las consecuencias biológicas del consumo de alcohol a niveles más bajos que los hombres", dijo Chander, y anotó que las directrices limitan a las mujeres a no más de 7 bebidas estándares por semana, en comparación con 14 bebidas para los hombres.

El nuevo estudio aparece en la edición en línea del 25 de octubre de la revista BMJ Open.


♦ Fuentes: Tim Slade, Ph.D., epidemiologist, National Drug and Alcohol Research Center, University of New South Wales, Australia; Victor Karpyak, M.D., Ph.D., alcohol researcher, Mayo Clinic, Rochester, Minn.; Paul Rinaldi, Ph.D., director, Addiction Institute at Mount Sinai West; Geetanjali Chander, M.D., M.P.H., associate professor, medicine, Johns Hopkins University, Baltimore, Md.; Oct. 25, 2016, BMJ Open, online