Por Kathryn Doyle
NUEVA YORK (Reuters Health) - Para prevenir un segundo esguince de tobillo, el uso de una banda elástica sería más efectivo que la rehabilitación neuromuscular, aunque un equipo en Holanda aclara que ningún método es a prueba de fallas.
Los autores observaron que los participantes que habían tenido un esguince de tobillo eran un 50 por ciento menos propensos a tener un segundo esguince si usaban una tobillera que los que participaron de un entrenamiento neuromuscular.
Eso no significa que los pacientes reemplacen la rehabilitación con la tobillera, según aclaró el autor principal, doctor Evert A L M Verhagen, especialista en salud pública y ocupacional del hospital afiliado a la Universidad de VU, en Ámsterdam.
El experto aclaró que los resultados podrían atribuirse al azar.
El equipo de Verhagen pensaba que ambos métodos serían igualmente efectivos y sólo quiso comprobar cuál era más costoso en el largo plazo.
Los esguinces de tobillo son un cuarto de todas las lesiones deportivas, según publican los autores en British Journal of Sports Medicine.
En Holanda, cada esguince de tobillo cuesta unos 500 dólares. Eso significa que el gasto anual en esas lesiones es de unos 286 millones de dólares.
El equipo estudió a 380 atletas adultos (menores de 70 años) que dedicaban por lo menos una hora semanal a un deporte y que acababan de sufrir un esguince de tobillo.
Los organizó en tres grupos: uno participó de un programa de entrenamiento neuromuscular durante dos meses, mientras que otro utilizó una tobillera semirrígida durante 12 meses y el tercero usó ambas intervenciones a la vez durante dos meses.
El grupo tratado con el entrenamiento realizó ejercicios especiales de tobillo en el hogar durante 30 minutos, tres veces por semana. El programa incluyó el uso de una tabla de equilibrio y de un DVD con instrucciones sobre cómo hacer los ejercicios.
Los usuarios de la tobillera recibieron el modelo llamado Aircast A60 Ankle Support, que cuesta 40-50 dólares en internet.
Durante el año que duró el estudio, 69 participantes tuvieron un nuevo esguince en el mismo tobillo.
Los usuarios de la tobillera fueron menos propensos a sufrir la segunda lesión que los participantes del programa de ejercicio (un 15 por ciento del primer grupo versus un 27 por ciento del grupo tratado con entrenamiento y el 19 por ciento del grupo que combinó las intervenciones).
Ningún grupo perdió más tiempo o gastó más dinero por sus lesiones. Los segundos esguinces fueron casi igual de graves en todos los grupos.
"La experiencia me dice que la combinación de la tobillera con el ejercicio sería lo mejor", dijo Timothy A. McGuine, investigador senior del Departamento de Ortopedia y Rehabilitación de la Facultad de Medicina y Salud Pública de la University of Wisconsin, en Madison.
Aunque los resultados sorprenden, McGuine -que no participó del estudio- los consideró creíbles por las características del estudio y porque los autores son muy respetados en la especialidad.
Pero Verhagen advirtió: "Sólo descubrimos un efecto en la prevención de una segunda lesión".
FUENTE: British Journal of Sports Medicine
Comparación con la rehabilitación neuromuscular
Usar tobillera es lo mejor después de un esguince
50 por ciento menos propensos a tener un segundo esguince.