Según un trabajo del Hospital de Clínicas

Un estudio permite predecir qué pacientes sufrirán crisis asmáticas

Se calcula que alrededor de 3,5 millones de personas padecen la enfermedad en el país.

En el mundo, más de 300 millones de personas sufren de asma, trastorno inflamatorio crónico de las vías aéreas, caracterizado por las sibilancias, la falta de aire, la opresión en el pecho. En el país, alrededor de 3,5 millones de niños y adultos padecen esta enfermedad que, según cifras del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, se cobra dos vidas diarias.

Pero aunque esta afección tiene consecuencias serias si no se trata, son muchos los que desconocen que la padecen y, según un estudio local publicado en la Revista Panamericana de Salud Pública , sólo el 8% recibe el tratamiento correcto.

Un trabajo realizado en los últimos dos años en la División Neumonología del Hospital de Clínicas mostró que un estudio sencillo permite predecir qué pacientes sufrirán crisis o exacerbaciones y cuáles no, y también si están recibiendo el esquema adecuado de tratamiento o si deben modificarlo.

El estudio Exacerbaciones y ausentismo laboral (firmado por Gené, Franchi, Antuni, Junemann, Giménez y Apelbaum) analizó la evolución de 290 pacientes entre 2006 y 2007 utilizando una de las herramientas más dinámicas y sencillas de que disponen los neumonólogos, el test del control del asma (ACT, según sus siglas en inglés), que a través de un sencillo cuestionario permite evaluar precisamente el grado de control de la enfermedad. Adicionalmente, el test también es útil para obtener datos epidemiológicos y socioeconómicos, ya que su análisis permite identificar el grado de gravedad del cuadro y las complicaciones asociadas.

"En 2006, durante la Semana del Asma de comienzos de mayo, evaluamos a 500 pacientes y les preguntamos cuántas exacerbaciones habían tenido el año anterior -cuenta el doctor Ricardo Gené, jefe de Neumonología del citado hospital-. En 2007 volvimos a evaluar a 290 de esos pacientes y pudimos comprobar cómo habían evolucionado, cuántas visitas de emergencia y cuántas internaciones habían requerido, y cuánto habían tenido que faltar al trabajo."

Para analizar los resultados, los médicos dividieron a los pacientes en tres grupos, de acuerdo con el nivel de control de la enfermedad que habían logrado. Los que obtuvieron un resultado de ACT inferior a 14, tuvieron 2,6 veces más exacerbaciones que los que obtuvieron entre 14 y 19, y 3,8 veces más que los que obtuvieron un ACT de entre 20 y 25. El riesgo de ausentismo en el grupo con ACT inferior a 14 fue 5 veces mayor que en el grupo de 14 a 19 y 8,6 veces mayor que en el grupo de 20 a 25.

"Pudimos comprobar que, utilizando los criterios clásicos, no podemos predecir quién tendrá crisis y quién no; en cambio, este test nos permitió hacer una predicción ajustada y verificar si el tratamiento estaba dando los resultados deseados", dice Gené.

Según el especialista, la mortalidad por asma descendió con respecto a la década del noventa en relación inversa a la eficacia del tratamiento.

"En este tiempo, el uso de corticoides aumentó un 230% y las muertes descendieron de 1000 a 700 por año, aproximadamente", afirma.

Las guías internacionales para la enfermedad indican que el control del asma requiere un enfoque combinado: es preciso educar a los pacientes y es indispensable seleccionar los medicamentos adecuados.

Un correcto manejo incluye el uso de corticoides como medicación de control, más broncodilatadores para atacar las crisis. "A menudo se implementa un mal tratamiento, dado que se abusa de los fármacos rescatadores (broncodilatadores), que deberían emplearse solamente para el tratamiento de las crisis -dice el doctor Juan Carlos Invancevich, presidente de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica, y docente de la cátedra de Inmunología de la Universidad del Salvador-. Si bien estos fármacos son medicaciones muy seguras, su uso abusivo lleva a que, por un lado, persista la inflamación y se deterioren los pulmones con lesiones permanentes, y por el otro, la acumulación de dosis puede producir temblores, taquicardia e incluso otros efectos cardiovasculares."

Dijo el doctor Daniel Colodenco, jefe de Alergia e Inmunología del hospital Ferrer: "Muchos médicos ignoran la importancia del control y más de la mitad de los pacientes no adhiere al tratamiento".

Cuando el asma está controlada, la persona no tiene síntomas, no se despierta a la noche, no necesita recurrir a medicamentos de rescate, puede realizar ejercicio y actividades físicas, tiene resultados normales en la prueba de función pulmonar (espirometría) y no tiene crisis o las tiene sólo muy ocasionalmente. 

 


 

España: 

6 de mayo de 2008: Día Mundial del Asma.
Los pacientes con asma consumen el 2% de los recursos destinados a la salud pública.

El coste del asma en España es superior al del SIDA y la tuberculosis juntos

· El estudio ASMACOST estima que el coste anual del asma en España es de 1.672 millones de euros y que el coste total de un paciente con asma, en España, asciende a 1.950 euros al año.

· Al mal control del asma se atribuye el 70% del coste- la totalidad de los gastos indirectos y gran parte de los costes directos sanitarios-.

· El asma en España afecta a un 5% de la población adulta, y entre el 8% y el 12% de los niños y adolescentes. En valores absolutos el asma asciende a más de 3 millones de adultos y más de medio millón de niños hasta los 14 años. El asma es, en la actualidad, la enfermedad crónica más prevalente en la infancia.

Otros resultados del estudio ASMACOST, financiado y desarrollado por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), muestran El 16,1% del gasto corresponde a recursos no sanitarios- absentismo laboral y escolar, incapacidades, jubilaciones anticipadas, y muertes prematuras- mientras que el 83,9% corresponde a los costes sanitarios.

Los resultados del estudio ASMACOST, que ha llevado a cabo el Área de Asma de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, muestran que el coste económico del paciente asmático adulto en España es de 1.950 euros. El coste del asma, incluidos tanto el gasto directo en la asistencia médica como los gastos indirectos derivados, por ejemplo, de la pérdida de productividad laboral, supera el del SIDA y la tuberculosis juntos. El asma es una enfermedad que afecta a entre el 5% y el 8% de la población adulta, y entre el 8% y el 12% de los niños. El Dr. Julio Ancochea, Presidente de SEPAR, comenta que “el asma ocasiona una importante carga económica para la sociedad ya que consume el 2% de los recursos destinados a la salud pública en los países desarrollados”. Asimismo, el Dr. Ancochea recuerda que “el asma es la enfermedad muy frecuente y en la actualidad es la enfermedad crónica más prevalente en la infancia. Se estima que 300 millones de personas la padecen en todo el mundo y en España, fallecen a causa del asma, 2 personas por cada 100.000 habitantes al año y unas 100.000 en todo el mundo. El carácter crónico del asma, junto a la necesidad de medicación tanto para combatir los síntomas como para controlar la inflamación bronquial, hacen que esta enfermedad respiratoria suponga una carga económica importante para todos los  sistemas de salud, así como para los individuos afectados, sus familias y la sociedad. El Presidente de SEPAR además señala que “la contaminación atmosférica, los cambios en la alimentación, padecer obesidad, la escasa actividad física, son factores presentes en nuestro entorno que incrementan la prevalencia de esta enfermedad”.

El estudio ASMACOST de SEPAR tiene como principal objetivo estimar el coste económico del paciente asmático adulto en España desde el punto de vista de la sociedad y las autoridades sanitarias. Los principales resultados del estudio muestran que los recursos sanitarios que generan un mayor coste económico son los medicamentos (27,9%), las exploraciones (24%), y los ingresos hospitalarios (17%). Aunque los datos obtenidos también manifiestan que los costes del asma dependen del nivel del control individual de cada paciente y del grado en que se eviten las exacerbaciones. El Dr. Vicente Plaza, Coordinador del Área de Asma de SEPAR, comenta que “los tratamientos actuales contra el asma son muy eficaces si la persona asmática los administra de forma adecuada según las recomendaciones de su neumólogo”.

Asimismo, el Dr. Plaza destaca que “el problema en el cumplimiento del tratamiento, reside, en ocasiones en que éste no está correctamente ajustado a la enfermedad o al estilo de vida de los pacientes, o es demasiado difícil de llevar a cabo, o bien existe  corticofobia- miedo al tratamiento a largo plazo con cortisona, por lo que es fundamental que médico y paciente intercambien sus creencias, miedos e información sobre la enfermedad, para conseguir un pacto sobre el tratamiento que puede ser más adecuado para cada paciente”.

Por su parte, la Dra. Eva Martínez Moragón, neumóloga miembro de SEPAR y coordinadora de la investigación ASMACOST, comenta que “el mal control del asma representa el 70% del coste total de esta enfermedad respiratoria”. Asimismo, la Dra. Martínez señala que “aunque el coste del control del asma es muy elevado, la existencia del infradiagnóstico y el mal control de la enfermedad suponen un gasto mayor. Es de vital importancia que los neumólogos consigan un tratamiento consensuado, ya que de este modo los pacientes participan de una manera activa en el control de su asma facilitándoles que pueden llevar una vida plena”. La Dra. Martínez señala también que “más que un paciente informado, el tratamiento del asma requiere un paciente formado, para lograr nuestro objetivo: llegar a un consenso con el paciente asmático”.

Por otra parte, los datos obtenidos en el estudio manifiestan que el coste del asma es mayor entre los asmáticos mayores de 65 años (2.277 euros), y en los asmáticos graves (2.728 euros, frente a los 961 euros del asma intermitente, 1568 euros asma leve, y 1625 euros asma moderada). De acuerdo con los resultados se estima que los costes directos del asma están aumentando, especialmente el gasto en la prescripción farmacológica, aunque también se aprecia una ligera disminución en los costes indirectos.

En el estudio ASMACOST han participado 627 personas de toda España, que se han estratificado en función de tres variables: nivel de gravedad- el 21,2% de los participantes sufren un asma intermitente, el 24,5% un asma leve, el 27,6% un asma moderado y el 26,6 un asma grave, en función del grupo de edad- la edad media es de 54 años de edad, y en función de la zona geográfica de residencia- el 70% viven en ámbito urbano, mientras que el 24,9% lo hacen en zonas rurales. Entre los participantes el 60% son mujeres, y en cuanto a la situación laboral el 35,4% son activos laboralmente, y el 52,5% son pensionistas o incapacitados, o bien amas de casa. Asimismo, el 7,5% son fumadores activos, 404 participantes aseguran que nunca han fumado y 170 son exfumadores.

La Dra. Martínez Moragón recuerda que “el tabaco incrementa el riesgo de padecer asma y dificulta el control de la enfermedad, y se debe tener presente todos los factores que desencadenan el asma, pero sobretodo los que son producto de las nuevas formas de vida, como el tabaquismo pasivo y la obesidad, ya que éstos pueden modificarse de forma positiva, con grandes beneficios para la población en general”. Asimismo, esta especialista señala que  “los asmáticos fumadores tienen más síntomas, más morbilidad y una calidad de vida inferior a los asmáticos no fumadores”.

Por otra parte, la Dra. Martínez señala que “el coste del asma en España es orientativo debido a la dificultad de realizar estudios que abarquen una población de pacientes lo suficientemente amplia como para extraer conclusiones definitivas”. La coordinadora del estudio  asegura que “desde SEPAR trabajamos para estimular el progreso en el conocimiento científico de las enfermedades respiratorias y con este proyecto multicéntrico pretendemos dar a conocer los costes totales que genera una de las enfermedades crónicas respiratorias más frecuentes”.

La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), con motivo del Día Mundial del Asma que se celebra el próximo 6 de mayo, ha puesto en marcha una campaña de sensibilización, dirigida a la sociedad en general y al colectivo médico en particular, sobre la importancia de esta patología respiratoria. SEPAR ha diseñado un portal on line www.diadelasma.com dirigido a profesionales médicos y a pacientes, que contiene información de carácter divulgativo y profesional, e incluso ofrece la posibilidad de descargar documentos en formato PDF que se pueden imprimir como póster para informar a pacientes, así como links a las distintas guías de manejo del asma dirigidas a pacientes y profesionales. SEPAR con el fin de dar a conocer esta enfermedad a la población en general colgará un spot documental en este portal, bajo el lema “¡tengo asma y qué!”, que también se podrá visualizar en diversos contendedores virtuales, como youtube.