Introducción
Estudios recientes señalan que los niveles de tirotropina dentro de los límites de referencia están positivamente y linealmente asociados con la presión arterial, el índice de masa corporal, y las concentraciones de lípidos séricos, produciendo efectos adversos sobre el aparato circulatorio.
Si bien tanto el hipotiroidismo como el hipertiroidismo están relacionados con riesgo de enfermedad cardiovascular, no hay evidencias sobre la asociación entre la función normal de la tiroides y la enfermedad coronaria.
En este trabajo, los autores examinan en forma prospectiva la relación entre los niveles de tirotropina dentro de límites normales y la enfermedad coronaria en una población de Noruega.
Métodos
Participantes. Entre 1995 y 1997, todos los habitantes de 20 o más años de edad del condado de Nord-Trøndelag en Noruega fueron invitados a participar en el estudio HUNT. Esta zona de Noruega tiene una población estable y homogénea y con una adecuada ingesta de yodo. En definitiva ingresaron al protocolo 66.140 personas de ambos sexos.
Estudios. Los participantes debieron completar un cuestionario sobre estilo de vida, antecedentes clínicos incluyendo patología cardíaca tiroidea y diabetes. También los participantes debieron registrar el uso de agentes antihipertensivos.
El examen clínico incluyó el registro de la presión arterial, el peso y la altura (índice de masa corporal). Las determinaciones de laboratorio realizadas fueron:
- Colesterol total.
- Colesterol-lipoproteína de alta densidad (C-HDL).
- Triglicéridos.
- Creatinina.
- Tirotropina sérica (esta determinación se realizó en 32.819 participantes).
Los participantes fueron agrupados en 3 categorías según la puntuación de la misma amplitud del nivel de tirotropina en sangre (0,50-1,4; 1,5-2,4; y 2,5-3,5 mIU/L).
Los criterios de exclusión fueron antecedentes de enfermedad tiroidea, enfermedad cardiovascular, diabetes y la falta de información sobre tabaquismo.
El seguimiento se extendió hasta la pérdida del control o la muerte del participante.
Criterios de valoración. El único criterio de valoración fue la muerte del participante.
Resultados
Los análisis ajustados al sexo mostraron una asociación positiva de los valores de tirotropina con el riesgo de mortalidad de causa coronaria en las mujeres (tendencia de p =0,005) (Figura 1).
En los hombres, los valores de tirotropina no estaban claramente relacionados con el riesgo de mortalidad coronaria.
El análisis de algunas variables mostró que el exceso de mortalidad se atenuaba en una quinta parte después de ajustar para lípidos, índice de masa corporal, presión arterial y creatinina sérica. La variable más fuerte fue la presión arterial.
Figura 1. Porcentaje de fallecidos a lo largo del seguimiento en ambos sexos según los valores de tirotropina en sangre.
Conclusiones
En este estudio prospectivo sobre una población de más de 25.000 personas, se encontró que los niveles séricos de tirotropina dentro de los márgenes de referencia estaban asociados positiva y linealmente con la mortalidad por enfermedad coronaria en las mujeres. En los hombres, no se observó una evidencia convincente en este tipo de asociación.
Se ha sugerido que los niveles de tirotropina dentro de los valores de referencia estarían asociados positivamente con el índice de masa corporal y negativamente asociados con la sensibilidad a la insulina. Las hormonas tiroideas también podrían afectar al sistema cardiovascular a través de efectos sobre las células del músculo liso, los miocitos, la angiogénesis coronaria, la función renal, la hemostasis, la oxidación de lipoproteínas de baja densidad y los valores de homocisteína. Además, la tirotropina puede tener efectos cardiovasculares que no están mediados por las hormonas tiorideas. Es así que la administración de tirotropina humana recombinante se asoció recientemente con un deterioro de la función endotelial.
Este estudio mostró que la mortalidad por enfermedad coronaria aumenta en las mujeres con el aumento de los niveles de tirotropina dentro de los valores de referencia. Los resultados sugieren que valores relativamente bajos, pero clínicamente normales de función tiroidea pueden aumentar el riesgo de muerte por enfermedad coronaria.
♦Comentario y resumen objetivo: Dr. Ricardo Ferreira.