Según un estudio reciente de la Harvard School of Public Health (Estados Unidos), la vitamina C de la fruta y los ácidos grasos omega 3 del pescado podrían ayudar a aliviar los síntomas del asma de los adolescentes.
"Los adolescentes que ingerían la menor cantidad de frutas, vitamina C y ácidos grasos omega 3 tendían a tener una menor función pulmonar y a informar sobre más síntomas respiratorios que los que tenían una ingesta mayor", aseguró la Dra, Jane Burns, autora del estudio.
Según informa la revista “Chest”, los investigadores incluyeron a más de 2.000 estudiantes de institutos de 12 áreas de Estados Unidos y Canadá.
Durante el curso de un año, le preguntaron a los adolescentes sobre sus dietas, sus problemas generales de salud y respiratorios y también examinaron su función pulmonar.
La mayoría de los adolescentes eran de raza blanca, cerca de la tercera parte tenía exceso de peso y casi las tres cuartas partes no tomaban un multivitamínico a diario. También cerca de la cuarta parte fumaba.
Casi una cuarta parte de los adolescentes tenían deficiencias en la dieta, en cuanto al consumo de frutas, verduras, vitaminas A y E, betacaroteno y ácidos grasos omega 3. Un 86% no consumía las cinco o nueve porciones de frutas y verduras recomendadas para cada día.
Los investigadores también encontraron que la cuarta parte consumía menos de una porción de fruta diario y tenía la media más baja de puntuación de la función pulmonar. Una ingesta baja de vitamina E, menos de 5,2 mg diarios, se relacionó con un aumento en el riesgo del asma.
Finalmente, una ingesta baja de ácidos grasos omega 3, menos de 22 mg diarios, se relacionó con un aumento en las probabilidades de bronquitis crónica, respiración sibilante y asma.
De hecho, los estudiantes que presentaban la menor ingesta de ácidos grasos omega 3 tuvieron al menos 70% más probabilidades de padecer síntomas de asma.
Chest 2007;132:238-245