Una intervención quirúrgica menor en pacientes de asma, denominada termoplastia bronquial, mejora los síntomas de la enfermedad, según un estudio de la Universidad McMaster en Ontario (Canadá) que se publica en "The New England Journal of Medicine".
El estudio muestra que los pacientes sometidos a esta operación, la primera que no emplea fármacos para el asma, experimentaron una mejoría global tras un año de seguimiento sufrieron menos ataques, disfrutaron de más días sin síntomas de la enfermedad y mejoraron su calidad de vida.
La termoplastia branquial es un procedimiento poco invasivo que reduce la cantidad de músculo liso de las vías respiratorias mediante un broncoscopio flexible a través de la nariz o la boca. El dispositivo genera una energía térmica con radiofrecuencia y reduce determinadas áreas de músculo liso. El procedimiento se completa en tres sesiones que duran aproximadamente una hora y entre las que se intercalan periodos de tres semanas. Tras la intervención, que requiere anestesia local, el paciente regresa a su domicilio en el mismo día.
New England Journal of Medicine 356:1327-1337