La farmacia como agente de salud

Entrevista a Linda Strand: creadora del concepto de "atención farmacéutica"

Ideas renovadoras sobre el rol social de la farmacia en la atención sanitaria que participará del XVII Congreso Farmacéutico Argentino.

Entrevistas

/ Publicado el 24 de octubre de 2006

Autor/a: Pedro Molina Porlán

Fuente: Correo Farmacéutico (España), 6 de septiembre de 2004

* Con motivo de la próxima visita de la Dra. Linda Strand, IntraMed publica una entrevista realizada en España con la experta. en atención farmacéutica.

Catedrática de Farmacia de la Universidad de Minnesota, en EE.UU., Linda Strand es, junto al profesor de la Universidad de la Florida Charles Hepler, la gran impulsora teórica de lo que en su momento, en 1990, se bautizó como “pharmaceutical care” -España lo ha llamado atención farmacéutica (AF)-, un concepto que fue recibiendo de forma paulatina la bendición de la OMS, la Federación Internacional de Farmacéuticos y las distintas organizaciones profesionales de este colectivo en todo el mundo. Es coautora del libro El ejercicio de la atención farmacéutica (Ed. McGraw-Hill, 1999) y ha publicado en revistas en EE.UU. y Europa decenas de artículos con los resultados positivos de diferentes estudios de puesta en práctica de esta actividad.

P: Usted explicó en 1999 que la AF era un tren en la estación a punto de partir, de forma que el farmacéutico debía tomar la decisión de comprar o no el billete. Cuatro años después, ¿dónde cree que está el tren? ¿Ve a la profesión subiéndose a él?

R: No es fácil responder a esta cuestión. Y creo que lo será durante algún tiempo. Aplicar la AF (así como enseñarla y desarrollar nuevas prácticas) requiere cambios muy significativos en la profesión. De hecho, yo no conozco ninguna otra que haya afrontado un cambio tan drástico y de manera exitosa. Llevará varios años de práctica y de enseñanza conseguir que la AF se desarrolle lo suficiente como para medir el grado de éxito logrado. Calculo que pasarán otros diez años antes de que podamos hablar de cambios reales en esta profesión.

P: ¿Cuál es la situación actual en su país?

R: Yo mido el desarrollo de la AF por el número de pacientes que han sido tratados de forma protocolizada y han sido documentados en términos de PRM y sus resultados. Esto ocurre en zonas aisladas de EE.UU. En Minnesota se ha trabajado en AF con más de 25.000 pacientes hasta ahora. Sé de otros farmacéuticos que han empezado, pero aún no tenemos documentación fiable de cuántos o cómo... Para que el servicio se estandarice falta un cambio de hábitos, y la profesión todavía es reticente a hacer lo que debe para lograrlo.

P: Y mientras eso ocurre, ¿cree que es mejor que unos pocos hagan mucho o que muchos se impliquen aunque sea en menor medida?

R: La atención al paciente no se puede hacer en pequeñas dosis. Para cualificar una actuación como tal, el plan de asistencia y la evaluación continua deben ser completas y estar documentadas. En Medicina y Enfermería están establecidos unos estándares que no son negociables, que requieren un proceso de pensamiento racional, valoraciones fáciles de entender, un plan de atención y una continuidad hasta que se consigan los objetivos de la terapia. Hasta que la Farmacia no siga este camino no será reconocida y recompensada como una profesión de atención al paciente. Hay quien alerta de que si en España no se consolida la AF, a medio plazo el modelo puede fracasar y verse abocado a una liberalización.

P: ¿Cree que esta amenaza es real?

R: La AF triunfará. Es una manera racional de tomar decisiones sobre la farmacoterapia, y la necesidad es tan grande que alguien la asumirá. No estoy segura de que sean los farmacéuticos los que lo hagan, pero sí de que alguien en el sistema de salud tendrá que hacerse cargo de esta responsabilidad.

P: Hay expertos que defienden que la AF no se generalizará hasta que no se obligue realmente al farmacéutico a ofrecerla...

R: Una práctica profesional debe empezar por los propios profesionales. La legislación, regulación o reembolso de esta actividad no harán por sí mismas que se practique. En todo caso estas iniciativas pueden facilitar su expansión, pero la profesión debe liderar el movimiento para que se haga realidad.

P: ¿Qué importancia tiene el diálogo institucional entre médicos y farmacéuticos? ¿En qué medida ralentiza el desarrollo de la AF o lo estimularía?

El cuidado de los pacientes es, digamos, un marcaje al hombre. Para hacer AF cada farmacéutico debe comunicarse con el enfermo y con los otros cuidadores de ese paciente (médicos, dentistas, enfermeras...). Cuando esto es una verdadera rutina diaria podemos decir que hay comunicación. Muchas de las dudas y temores que existen en torno a la AF se resolverían si los farmacéuticos empezaran a incluirla en su rutina diaria.

P: ¿Cuál es, a su juicio, la fórmula ideal para conseguir motivar a los profesionales para que se lancen al ejercicio de la AF?

R: Será un proceso de autoselección. No es posible forzar a alguien a que cuide a otro ser humano. Por este motivo hay que educar mejor al farmacéutico en lo que es la AF, pero si éste decide no hacerla no habrá mucho que decir.

Currículum de Linda M. Strand

• Licenciada en Farmacia por el College of Pharmacy de la Universidad de Minnesota.

• Doctora en Farmacia por la Universidad de Minnesota

• Miembro del Peters Institute of Pharmaceutical Care de la Universidad de Minnesota

• Autora de un extenso número de publicaciones sobre Atención Farmacéutica

• Receptota de numerosos premios entre los que destacan el otorgado junto a R. Cipolle y P. Morley, por la Asociación de Farmacéuticos de Minnesota (“Innovators in Practice Awad”) y el de la American Pharmaceutial Association, junto con el Dr. Charles D. Hepler (“Remington Medal”).

* Accede al archivo pdf de una conferencia de la Dra. Linda Strnad haciendo click aquí

* Información sobre el XVII Congreso Farmacéutico Argentino haga click aquí