Epidemiología

La morbilidad del planeta

El sida es responsable ya del 14% de las muertes por enfermedad en el mundo, frente al 2% de hace 10 años.

Un informe sobre la evolución de la salud global publicado en "The Lancet" muestra una reducción del 20% de la morbilidad en el planeta

Las muertes por sida han pasado de suponer el 2% de los fallecimientos por enfermedad en todo el mundo en 1990 al 14% en 2001, según un estudio de la Universidad de Queensland ,en Brisbane (Australia), que ha analizado la carga de enfermedad mundial entre esos años. El estudio, cuyos resultados se publican en "The Lancet", muestra, sin embargo, una reducción global del 20% de la morbilidad en el planeta.

Los autores señalan que se ha producido una mejoría sustancial en la salud en la mayoría de las poblaciones entre 1990 y 2001. Sin embargo, el periodo también ha estado marcado por grandes problemas, caso de la epidemia de VIH/sida en el África Subsahariana y al aumento de la mortalidad en países de la antigua Unión Soviética.

Los expertos explican que el último estudio global sobre la carga de la enfermedad en el mundo se realizó en 1990. En el estudio actual los científicos analizaron la mortalidad, incidencia y prevalencia de 136 enfermedades y heridas en siete áreas geográficas en 2001.

Los investigadores han descubierto que en todo el mundo hubo un 20% de reducción en la carga global de enfermedad per cápita entre 1990 y 2001, sobre todo debido al progreso en el afrontamiento de los trastornos infecciosos, nutricionales, maternales y perinatales. Cerca de un 20% de estas muertes se produjeron entre niños de menos de cinco años. El VIH/sida dio lugar al 2% de las muertes en 1990, pero al 14% en 2001.

La mortalidad por malaria también parece haber aumentado en la década de los noventa, sobre todo en África Subsahariana. La enfermedad cardiaca y el ictus fueron las principales causas de mortalidad en los países de ingresos económicos altos y medios-bajos, dando lugar a una quinta parte de las muertes. El cáncer de pulmón fue la tercera causa de muerte en los países de ingresos altos pero no se encontró entre los primeros puestos en los países de ingresos medios-bajos, donde 5 de cada 10 muertes se produjeron por enfermedades infecciosas.

Los científicos afirman que en el mundo, el VIH/Sida y la malaria son las causas de mortalidad y de carga de enfermedad más importantes, especialmente en África Subsahariana, donde se anulan los datos sobre la reducción en mortalidad infantil en África debido a la incidencia de la rubéola, las infecciones respiratorias graves y la diarrea.

Los autores también indican una "notable reversión" en el descenso de las tasas de mortalidad adulta en Europa del Este durante la década de los 90 en ausencia de un control eficaz de políticas de salud.

Lancet 2006;367:1747-1757

***

Una nueva visión del VIH puede permitir acelerar el desarrollo de vacunas efectivas

Científicos norteamericanos han empleado tomografía microscópica de crioelectrones para observar la estructura de dos proteínas que se hallan en la superficie del virus del sida

Jano On-line
25/05/2006 10:48

Científicos estadounidenses publican en "Nature" nuevos descubrimientos relacionados con proteínas que se encuentran en la superficie del virus del sida, hallazgos que, a su juicio, podrían acelerar el desarrollo de una vacuna efectiva contra esta enfermedad.

En concreto, los investigadores de la Universidad de Florida State se refieren a las proteínas gp120 y gp41, las cuales permiten al VIH unirse y fusionarse con las células humanas que infecta.

Lo que han hecho es obtener una visión tridimensional del virus en la que se aprecian las proteínas de su superficie. Las dos citadas son únicamente dos moléculas que constituyen dianas interesantes para una vacuna.

La técnica utilizada se conoce como tomografía microscópica de crioelectrones. Les permitió ver las puntas que sobresalen de la superficie del VIH, unas 14. En concreto, esas puntas que sobresalen consisten en tres proteínas gp120 y tres gp41.

Según los autores, ya hay dos laboratorios que emplean esta información para redefinir vacunas en desarrollo.

Nature 2006;doi:10.1038/nature04817