No hay manera fácil de comprobar la teoría de la falta de oxígeno en los seres humano y el hallazgo probablemente no llevará a mejores tratamientos en un futuro cercano. Aún así, la investigación le da a los científicos una mejor idea de cómo otros factores distintos a la genética podrían tener con el autismo.
Los síntomas del autismo puede variar entre leve y grave. La discapacidad generalmente aparece a los tres años, dura toda la vida y no tiene cura, aunque algunas personas pueden aprender a funcionar bien.
Los científicos no saben con certeza qué causa el autismo, aunque es posible que tanto la genética como el ambiente estén relacionados con esta patología. Por razones que no son claras, el autismo parece haberse tornado más común en los últimos años. Una teoría intensamente debatida sugiere que las vacunas son las responsables, aunque algunos estudios no han logrado encontrar una relación.
Se considera que la privación de oxígeno durante el nacimiento es una causa posible porque puede conducir al daño cerebral. Por ello, los investigadores incrementaron el nivel de nitrógeno en el aire, para privar de niveles normales de oxígeno a las crías de las ratas de 10 a 12 minutos durante el nacimiento. Cuando las ratas envejecieron, mostraron síntomas similares a los hallados en los niños autistas. Se tardó más para que las ratas respondieran a los mismos sonidos, por ejemplo, y las regiones del sonido que procesan los sonidos habían resultados afectadas.