No existe una norma general para el tratamiento de la OAT en su primer etapa (inflamación). Los corticosteroides reducen las manifestaciones transitorias de la OAT pero los numerosos efectos adversos hacen que la relación riesgo/ beneficio sea desfavorable.
Los efectos benéficos del uso local de esteroides (inyecciones subconjuntivas o retrobulbares) para el tratamiento de la OAT ya ha sido informado en la literatura médica.
No tenemos conocimiento de estudios destinados a demostrar las ventaja de los esteroides locales (inyecciones perioculares) para tratar la OAT en su primara etapa. Además hemos analizado el impacto de los efectos secundarios relacionados con la administración local de esteroides.
Pacientes y métodos:
El presente es un estudio piloto, prospectivo, multicentro, en 50 pacientes diagnosticados con oftalmopatía de Graves seis meses antes de ingresar al estudio. Los pacientes fueron divididos aleatoriamente en dos grupos: tratamiento y control. El grupo de tratamiento recibió cuatro dosis de 20 mg de acetónido de triamcinolona 40 mg/ml mediante inyección peribulbar hacia el cuadrante inferior, lateral de la órbita. Ambos grupos fueron evaluados mediante la medición del área de visión sin diplopía binocular en perímetro de Goldmann y el tamaño de los músculos extraoculares se midió por tomografía computada. Se realizaron exámenes oftalmológicos y sistémicos para descartar efectos adversos. El período de seguimiento fue de seis meses para ambos grupos.
Figura 1. A) Área sin diplopia tomada con perímetro de Goldman en un paciente del grupo de tratamiento antes de iniciarlo.
B) Mejoría en el área sin diplopia del mismo paciente en la semana 24.
Figura 2. A) Tomografía computada, vistas coronales de los músculos extraoculares en un paciente del grupo de tratamiento, antes de iniciarlo.
B) Vistas coronales de los músculos extraoculares del mismo paciente del grupo de tratamiento en la semana 24.
Figura 3. A) Paciente del grupo de tratamiento, aspecto facial antes de iniciar el tratamiento. B) La misma paciente en la semana 24.
La triamcinolona es un gluco-corticosteroide con una potencia equivalente a cinco veces el cortisol, se metabolisa en el hígado y se excreta por la orina.
Su administración mediante inyecciones peribulbares en el cuadrante inferior, lateral de la órbita permite su difusión en la grasa retrobulbar hacia los músculos extraoculares.
Se han informado múltiples complicaciones con las inyecciones perioculares de esteroides, incluyendo la perforación del globo, oclusión arterial, neuropatía óptica tóxica o atrofia del tejido subcutáneo de la cara. No tuvimos ninguna de estos problemas en la presente serie.
En este estudio se demuestra una mejora en la motilidad, en especial en el grupo de pacientes con diplopia no permanente y una reducción en el tamaño de los músculos extraoculares. La agudeza visual mejor corregida permaneció sin cambios, como así también la PIO, exoftalmia y examen de la cabeza del nervio óptico. No hubo cambios en el peso corporal o la presión sanguínea. Los niveles de glucemia, calcemia y cortisol permanecieron dentro de los valores normales para los pacientes de ambos grupos. El cortisol en orina se redujo el 31,58% en el grupo de tratamiento en relación con un 3,52% en el grupo sin tratamiento. Aunque estos valores no son estadísticamente significativos, podrían sugerir una leve baja de la producción endógena de cortisol.
En el presente estudio se demuestra un efecto favorable de la triamcinolona administrada mediante inyecciones perioculares en el tratamiento de la OAT. Los pacientes sometidos a tratamiento con triamcinolona tuvieron menos diplopia y disminución del tamaño de los músculos extraoculares. No se observaron efectos secundarios del esteroide ni complicaciones locales causadas por el procedimiento. Sería necesario confirmar estos resultados en una serie más numerosa de pacientes.
Conclusiones:
La triamcinolona administrada mediante inyecciones perioculares es efectiva para reducir la diplopía y el tamaño de los músculos extraoculares en la OAT inicial. Este tipo de tratamiento no tiene efectos colatelares sistémicos ni oftalmológicos.