Entrevista x Matemático + Periodista

Entrevista, Adrián Paenza: el mundo y sus mundos

Se recibió de matemático a los 20 años. Hoy es un famoso y reconocido periodista. Recientemente publicó su libro “Matemática, ¿estás ahí?” (disponible on line).

Autor/a: IntraMed

Si hacemos un pequeño resumen de su carrera, ¿Qué me contaría?

Bueno. Aquí va. Nací el 9 de mayo del 49. Obtuve mi título de licenciado en matemáticas en 1969, y el de doctor, en 1979. Desde ese momento, soy profesor del Departamento de Matemática de Exactas, UBA. Antes, desde 1965, fui ayudante de segunda, de primera, jefe de trabajos prácticos...hice toda la escala. Aún hoy, sigo siendo profesor.

Como periodista, comencé en junio de 1966, en “La Oral Deportiva” que dirigía José María Muñoz por Radio Rivadavia. Empecé como periodista dedicado más al deporte. Después, trabajé en distintas radios, en todas las importantes de la Capital de proyección nacional, como Rivadavia, Continental, Porteña, Belgrano, Mitre, del Plata, Argentina, El Mundo, entre otras. Supongo que los programas más destacados, por su trascendencia y por la repercusión que tuvieron, fueron “Sport 80”, “Equipo 10” y “Buscando la Vuelta”.

Debuté en televisión en febrero de 1972 y desde entonces seguí siempre ligado de una u otra forma con ella. Trabajé en todos los canales de aire y también en algunos canales de cable. Fui co-conductor del ciclo “Fútbol de Primera” y de “Todos los Goles” durante muchos años. Si bien el fútbol ocupaba la mayor parte de mi tiempo como periodista, después, o tal vez en simultáneo, trabajé en el basketball, especialmente conduciendo los programas inaugurales de la NBA en la Argentina, por los canales 9 y 13.

Después, coparticipé en “Día D”, con Jorge Lanata, en “Detrás de las Noticias” con el mismo grupo y finalmente en “Periodistas” con Marcelo Zlotogwiazda y Ernesto Tenembaum. Hoy, estoy trabajando en “Científicos Industria Argentina”, ciclo que empezó en el 2003 en Canal 7 y que desde el 2005 se emite por Telefé.
Escribí durante muchos años en la revista XXIII, al principio XXI y luego XXII, y también tengo múltiples colaboraciones en La Nación, Clarín y Página 12.

¿Y cómo fue la experiencia de la transición del mundo de la ciencia, de la matemática, al periodismo?

Yo no sentí nada en particular, porque yo soy la misma persona, que tiene múltiples actividades. Yo me siento un tipo curioso, pero mi curiosidad no está concentrada en un solo foco, sino que corta transversalmente varias áreas. Me siento un comunicador también: me gusta contar lo que vea, compartirlo y difundirlo. Por supuesto, necesito que lo que estoy por contar me apasione y me guste. No puedo “vender” un producto como un locutor. Necesito estar convencido yo primero, antes de “contárselo” a los demás. Eso vale tanto como periodista cuanto como docente.

¿Cree que es importante ser curioso, creativo, más allá de la ilustración, del conocimiento?

Yo creo mucho en la creatividad... en la capacidad de la gente de intuir distinto, de tener ideas que no tuvieron otros, de poder caminar por lugares que a otros no se les ocurrirían, ni más ni menos porque “van por los caminos standards, los esperables”... sin embargo, hay gente capaz de “descubrir” porque es audaz y no lo sabe, porque “inventa” porque no tiene idea de la dificultad, y por eso, la creatividad tiene un lugar tan importante en la historia de la ciencia, o mejor dicho, en la historia del hombre...

¿Cuál es la relación entre creatividad e inteligencia, qué es la inteligencia para Ud.?

Respecto del parentesco de la creatividad con la inteligencia, yo tengo un problema con la definición de la palabra inteligente o inteligencia, porque no sé bien lo que quiere decir... intuyo lo que la gente quiere  que sea una persona inteligente, porque necesita también que haya algunos referentes de su clase, de su especie que sobresalgan por algo, y entonces, le atribuye algunos “poderes mágicos” o algo así... pero yo no se bien como definirla... muchos hablan de rapidez, otros de profundidad, otros de algo genético, otros de algo que tenga que ver con el medio ambiente, y yo me inclino mas, aun con todos los reparos que te traslade recién, a decir que a igualdad de condiciones, todo el mundo, todos los chicos descubrirían cual es su destreza o su habilidad... el problema es que algunos privilegiados vivimos con posibilidades de descubrir dentro del menú que se nos ofrece, que es lo que más nos gusta. No todos, o mejor dicho, casi ninguno de los chicos que nacen en el mundo, tienen esa posibilidad.Cuando se le haya dado a todos los chicos que nacen las mismas posibilidades, entonces, veremos que querría decir la inteligencia. Mientras tanto, para mí es un conglomerado de ideas muy confusas en donde uno quiere 'ubicar' a algunas personas y distinguirlas por alguna cualidad que siempre cuesta trabajo definir... y por otro lado, uno, ¿es inteligente en abstracto?, ¿es inteligente para todo?... pero si me parece que hay gente que en el campo que le gusta, es creativa... en donde se descubre fértil y capaz, se siente cómoda, se le ocurren cosas, fantasea y descubre, inventa, crea.



La matemática se usa para explicar tanto cosas muy concretas (que vemos) como muy abstractas (que no vemos). ¿Qué definición daría Ud. acerca de la  matemática que abarque estas dos situaciones?

En principio, creo que las cosas que  llamamos abstractas, porque no las vemos, son cosas que están dentro nuestro, y con las que tenemos que 'lidiar' todo el tiempo: nuestros pensamientos. Uno puede  deshacerse de muchas o de toda cosa material. Pero no puede deshacerse de su pensamiento. Posiblemente, cuando sueña, o cuando duerme, pero eso ya es otra historia. La idea o definición que la gente tiene de lo que “es” la matemática, me parece que está totalmente alejada de la verdad. La culpa, obviamente, es nuestra, de quienes la tenemos que comunicar. Lo hacemos mal. Lo hicimos mal. Hemos fracasado. Más allá de los innumerables intentos, y no solo en la Argentina, sino también en el resto del mundo, hemos fallado. Entonces, ha llegado la hora de modificar lo que la gente cree que es. La matemática no es ni contar ni hacer cálculos. No se trata de ser ni más rápido para hacer cuentas ni saber mejor las tablas, o poder hacer mentalmente operaciones que para las calculadoras o computadoras es una trivialidad. Los matemáticos, como dice Luis Cafarelli, quien es posiblemente el mejor matemático vivo que haya producido el país: “hacemos pensamientos y no números”.
La matemática ayuda a pensar. Provee de una herramienta poderosísima para poder hacer piruetas en el aire, y saber que uno tiene una red abajo que sostiene los posibles errores. Pero hay que saber comunicarla.

Mostrar las preguntas y no abundar en respuestas a cuestionamientos que nadie se hizo. El problema está en que históricamente, hemos vivido dando respuestas a preguntas que nadie se hizo. Y eso es aburrido, inaceptable e inútil. Ha llegado la hora de cambiar.

Y así como la distribución de la riqueza es inequitativa, en términos de poder adquisitivo, la riqueza intelectual también está mal distribuida. Y es obligación cambiar esa distribución también. Todo el mundo tiene derecho a acceder al pensamiento, y por eso, la matemática ofrece una belleza sin par, y una herramienta poderosísima para aprender a tomar decisiones educadas.

¿Considera importante la existencia de la interdisciplina?, ¿Para Ud. existe un límite real y preciso entre las ciencias?

Sí, considero imprescindible la interdisciplina, porque la separación en diferentes ciencias fue un recurso, y lo sigue siendo, creo, que simplemente facilitó en un momento determinado la capacidad de la gente de dar curso a su supuesta vocación. Hoy, esas divisiones son cada vez más arbitrarias y poco conducentes. Entiendo la necesidad de las especializaciones y no tengo nada contra ellas. Pero al mismo tiempo, la cultura general de una persona, requiere de abarcar distintas disciplinas independientemente de lo que diga la carátula. Y ese supuesto límite preciso y real entre las distintas ciencias, es cada vez más borroso y artificial.

¿Cómo cree que sería la mejor forma de promover la interdisciplina y generar mayor intercambio entre las ciencias?

Planteando problemas. La tarea de la ciencia es resolver problemas. Los
problemas son de distinto tipo y aparecen en distintos ámbitos. Pero cuando uno tiene un problema, no aparece con una marca en el orillo que diga: problema para un ingeniero, o problema para un médico o problema para un biólogo... los problemas son problemas y no importa que especialidad tenga el que lo resuelva o los que los resuelvan. Los abordajes se enriquecen cuanta más gente trabaja y cuántas más formaciones distintas tengan.



¿Qué obstáculos deberíamos sortear para que eso mejore en Latinoamérica?

Discutir en las universidades públicas los temas, los programas y los propósitos en general. Pero la sociedad tampoco puede estar ajena. La sociedad necesita comprender que las universidades son el reservorio en donde se produce conocimiento y está la garantía de la independencia como país. Pero además, debe entender que allí están concentrados grupos de personas que en sus laboratorios, en sus oficinas, en sus bibliotecas, o en sus lugares de trabajo, piensan problemas. Y buscan soluciones.

Recientemente publicó un libro (“Matemática, ¿estás ahí?”), ¿De que trata?


Sería petulante decir de qué se trata, porque bien, no sé. Escribí lo que creo que hace falta como interconexión entre la sociedad y la matemática.
Si el libro consiguió que haya al menos una persona que se sintió atraída por la belleza de la matemática o de la ciencia, el objetivo está largamente cumplido.

Acceso al texto completo del libro haga click aquí

"Matemática, ¿estás ahí?", fue muy vendido..., ¿A qué lo adjudica?

Creo que hay una gran avidez hoy por el conocimiento. Es vital la tarea de los comunicadores. Digo que es vital, porque son ellos los que llegan sistemáticamente. otra vez, sistemáticamente a las casas de todo el mundo. Difundir lo que se sabe hoy, los problemas de hoy, las dudas de hoy, es una manera de mejorar como sociedad. Hoy hay más suplementos en los diarios dedicados a la ciencia, así como hay más colecciones de libros dedicadas al efecto, como aparecen más películas, como Una Mente Brillante, La Prueba, Good Will Hunting, cuyo nombre en castellano no conozco,... así como obras de teatro por ejemplo Copenhague, Galileo, La Prueba, entre otras,  y canales de cable dedicados a lo mismo como Discovery channel, The Learning Channel, National Geographic, Animal Planet,...es decir, hay mucha más oferta de obras de científicos. Todavía hoy son contemplados como rarezas y hay una gran tentación a idealizar y poner en un pedestal, como algo supuestamente inalcanzable. La tarea entonces, es desmitificar eso, y generar vasos comunicantes, que permitan entender que ni los científicos son todos loquitos o extravagantes, ni lo que producen está sólo reservado a una élite, sino que es el producto de la interacción natural entre los distintos grupos de personas que conformamos una sociedad. En esencia, todo se reduce a resolver problemas. Eso sí: hay que darle a la sociedad las herramientas para poder hacerlo, y esa herramienta, es inexorablemente la educación. Sin educación, no hay futuro, ni independencia, sino abusos y aprovechamiento del más débil e ignorante.

Ud tiene ideas bastante atípicas acerca de lo que es la educación tradicional. ¿Qué cosas modificaría de la enseñanza tradicional?

Uff..., eso sería muy largo de contestar. En principio, creo que habría que mezclar y dar de nuevo. La estructura de la educación en general, merece una revisión. Y no sólo en el país: en general. Los contenidos, ni hablar, pero la metodología es vital. Y por supuesto, hay que capacitar a los docentes. Pero no sólo pagarles bien. Hay que pagarles como a los mejores, porque son la clave del progreso.

Una vez por casualidad, tuvo una pequeña “incursión” en la medicina... ¿Podría contar la historia?

Fui a hacerle una nota a Pablo Argibay..., en un momento determinado se me ocurrió hacerle una pregunta que tenia que ver con el tema del hígado artificial que habían desarrollado ellos, se me ocurrió preguntarle si allí, en el Hospital Italiano, se hacían “diálisis hepáticas”... cosa que yo acababa de inventar, ni mas ni menos porque se me ocurrió que así como hay máquinas que dializan a las personas que tienen problemas como la insuficiencia renal, de la misma manera se debería hacer con los de hígado... el me contestó, pero después confesó, que nunca se le había ocurrido que eso se podía hacer, que fue, que consultó con su equipo de colaboradores, y que ninguno de ellos había escuchado nunca hablar de algo así..
Entonces, recurrió a la literatura y a sus conexiones y contactos en el mundo, para saber si alguien lo hacía, y me dijo, que después de bastante tiempo, advirtió que en realidad eso no lo hacia nadie. Y por eso se le ocurrió escribirlo y realizarlo.

¿Cuál es su imagen de la medicina y los médicos actuales?

No sé exactamente hacia qué lugar apunta la pregunta, pero yo tengo un gran respeto por aquellos que hacen medicina en serio. Los que investigan, y los que la practican. Por supuesto, me refiero siempre a la honestidad intelectual imprescindible en cualquier aspecto. Eso sí: con lo que estoy fuertemente en desacuerdo es que la medicina sea paga. La salud de la población es una obligación del Estado. Nadie puede estar privado de la mejor atención. Dije, la mejor atención posible, porque no la puede pagar. Llegará el momento en que será visto como criminal, que unos, como yo, tengamos acceso a la mejor medicina posible, y otros, muchos, pero realmente, muchos, se mueren o quedan mutilados o arruinados por desnutrición, porque no tienen el dinero suficiente para poder proveerse una vida digna. Desde ese lugar, la medicina y los médicos, necesitan tener siempre el apoyo estatal, que garantice igualdad para todos sus ciudadanos.

A veces los medios son un tanto imprudentes al difundir noticias, sobre todo en lo que refiere a nuevos tratamientos para combatir enfermedades, muchas veces incurables, cuyos ensayos se encuentran aún en una fase experimental muy prematura ¿Qué piensa al respecto?, ¿Es la responsabilidad de los medios, o de los científicos que comunican la información a los medios?

Pienso lo mismo que para muchas cosas en donde los medios no tienen rigor. Y no lo tienen no solamente con noticias que tienen que ver con medicina, sino que no se coteja con otras fuentes, no se averigua el origen de la noticia, se ignora el impacto que puede tener en la gente noticias que generan expectativa, ilusión, etcétera...

El manejo de los medios de comunicación y en especial, de los comunicadores, es un tema muy delicado. En tanto que no haya ninguna regulación, cualquiera puede comprar un medio, cualquiera puede trabajar en un medio, cualquiera puede hablar o escribir en un medio, incluido yo, naturalmente y desde ese lugar, se transforma en una herramienta muy peligrosa.
Entiendo que es el precio que muchas veces es preferible pagar, para que no haya censura (ni previa ni posterior) pero al mismo tiempo, los editores, jefes de noticias, directores de los medios, deberían tener una preparación que no siempre tienen.

Dr. Pablo Argibay (Hospital Italiano)dixit:

" El tema con Adrián es así: creo que básicamente es un tipo muy por arriba del nivel intelectual de la media. Como decía Schopenhauer (me tomo alguna diligencia al respecto): "La gente normal despues de mucho esfuerzo y entrenamiento le pega al blanco, la gente con talento, le pega de entrada, los tipos geniales apuntan a un blanco que los normales no podemos ver." Ese es el caso con Adrián. A mi me dejó sorprendido en dos oportunidades, en una , esa de la diálisis hepática, cuando el plantea que por que no hay unidades de "diálisis hepática" como la hay renal, para los enfermos con enfermedades hepáticas terminales. Y mas o menos, comenta algo parecido a lo que en años veníamos trabajando en  hígado artificial y que muchos hepatólogos no pueden ver ni con lupa.
El otro tema fue más espectacular. El me pregunta por las células madre del embrión y como se forma el individuo. A fuerza de pregunta super lúcidas , me deja casi sin respuesta, yo regreso al laboratorio y desde entonces estoy trabajando en una línea de investigación que en cierta forma es una respuesta a las preguntas de Adrián Paenza. En fin matemático, deportólogo, hombre de negocios, mentor de las ciencias...no hay duda de que Adrián Paenza es un hombre del nuevo renacimiento del siglo XXI."