Investigación

Riesgo cardiovascular en pacientes infectados por el VIH que reciben tratamiento antirretroviral

El 65% de los españoles infectados por el VIH/sida es fumador, prácticamente el doble que en el resto de la población, según el primer estudio realizado en España para conocer el riesgo cardiovascular de estos enfermos y el peso que tienen los lípidos (colesterol y triglicéridos), la hipertensión arterial, la lipodistrofia o el propio tabaquismo en la aparición de eventos vasculares, como la angina de pecho, el infarto de miocardio o el accidente cerebrovascular.

Un total de 126 hospitales españoles han participado en esta investigación que valoró en más de 2.000 pacientes el riesgo de sufrir una complicación vascular.

El estudio revela que recibir tratamiento antirretroviral aumenta el riesgo cardiovascular a 10 años en un 33-50% respecto al que tienen los enfermos que no han empezado a tomar antirretrovirales. De hecho, un 15% de los seropositivos españoles tiene muchas posibilidades de experimentar un infarto en los próximos diez años. En la actualidad, un 3,4% ya ha sufrido alguna complicación de este tipo, una cifra elevada al tratarse de pacientes que no superan todavía los 50 años.

Uno de los coordinadores del estudio, el Dr. Esteban Martínez, del Hospital Clínic de Barcelona, asegura que el caso del tabaquismo resulta especialmente llamativo. "Un 65% de fumadores es un porcentaje muy alto. Un problema frente al cual los médicos hemos tenido un poco de 'manga ancha' durante bastante tiempo y ahora tenemos que convencer al paciente de que si el tabaco, de manera aislada, es perjudicial para la salud, lo es mucho más cuando se comprueba que en muchos seropositivos, sobre todo en los que están en tratamiento antirretroviral, se añaden otros factores como el colesterol alto o la redistribución de las grasas conocida como lipodistrofia".

El estudio muestra que el 37% de los pacientes analizados presentaba lipodistrofia o redistribución de la grasa corporal. "Los datos muestran que la lipodistrofia es un factor de riesgo importante junto con ser varón y estar en tratamiento. Hemos comprobado que los pacientes con lipodistrofia aumentan el riesgo de ser hipertensos en un 60% y de tener diabetes en un 100%. También suele ser más frecuente que presenten obesidad y lípidos elevados. En general, el riesgo cardiovascular de un paciente con este trastorno de las grasas es el doble que el del resto de seropositivos e independientemente del tratamiento que esté tomando".

Los médicos alertan de la importancia de controlar el riesgo vascular pero sabiendo que la prioridad absoluta sigue siendo el control de la replicación del virus responsable del sida. Entre las familias terapéuticas, los datos apuntan a que el uso de inhibidores de la proteasa entraña un mayor riesgo, si bien hay que tener en cuenta que ya se han desarrollado nuevos fármacos de este grupo que no alteran los lípidos. "Concretamente -precisa el Dr. Martínez-, el estudio indica que entre los tratados aquellos que incluyen un inhibidores de la proteasa aumentan su riesgo cardiovascular un 30% más en términos absolutos".