Aproximadamente dos tercios de las mujeres embarazadas desarrollan pirosis.
El origen es multifactorial, pero el factor predominante es una disminución de la presión del EEI causada por las hormonas sexuales femeninas, especialmente la progesterona. Los factores mecánicos desempeñan un papel pequeño. Las complicaciones serias del reflujo durante embarazo son raras; por lo tanto la gastroscopia y otras pruebas de diagnóstico se necesitan infrecuentemente. La ERGE sintomática durante embarazo se debe manejar con la modificacion del estilo de vida y cambios dietéticos. Los antiacidos o el sucralfato se consideran la terapia médica de primera línea. Si persisten los síntomas, los bloqueadores H2 deben ser utilizados. La Ranitidina se prefiere debido a su perfil documentado de eficacia y seguridad durante el embarazo.
Durante el primer trimestre del embarazo los inhibidores de bomba de protones son reservados para la mujer con síntomas muy severos o enfermedad complicada por el reflujo. Lansoprazol puede ser el IBP preferido debido a su perfil de seguridad en animales e informes de la seguridad en embarazos humanos.
Richter JE. Enfermedad Acido Péptica y Embarazo, Departamento de Gastroenterología/Hepatología, fundación de la Clínica de Cleveland, avenida A30, Cleveland, OH 44195, los E.E.U.U. richtej@ccf.org de 9500