Según los científicos, los ojos muy abiertos en la expresión facial de miedo desencadenan una respuesta automática en el cerebro que ocurre antes incluso de que seamos conscientes de lo que estamos viendo.

El área cerebral llamada amígdala es una estructura antigua, en el sentido evolutivo, involucrada en la experimentación del miedo y en el aprendizaje relacionado con él. Según los investigadores, esta estructura responde ante las expresiones faciales de miedo y sorpresa, que incluyen ojos muy abiertos y que muestran una amplia cantidad de esclera.

Los científicos, consideran que la zona de los ojos en el rostro contiene información esencial para expresar emoción, por lo que analizaron en sus experimentos si el blanco de los ojos por sí mismo podía desencadenar este tipo de respuesta del cerebro.

Pare ello, utilizaron la técnica de la imagen por resonancia magnética funcional (IRMf) para monitorizar la actividad cerebral de voluntarios a los que se les mostró una serie de rostros. Antes de que apareciera cada rostro, una imagen de ojos abiertos u ojos reducidos de una expresión de felicidad aparecían tan rápidamente que los voluntarios no podían ser conscientes de lo que estaban viendo. No obstante, la actividad de la amígdala en los voluntarios mostró una respuesta a las imágenes de ojos muy abiertos.

Los investigadores realizaron una prueba similar con imágenes negativas, mostrando "ojos negros" y pupilas blancas. Los resultados indicaron que las neuronas del cerebro estaban respondiendo específicamente al tamaño de las zonas blancas del ojo más que a los contornos del ojo.

Webs Relacionadas
University of Wisconsin
http://www.wisc.edu/
Science
http://www.sciencemag.org/
Harvard University
http://www.harvard.edu/