Un problema frecuente en la práctica clínica es la subdiagnóstico de la enfermedad arterial de los miembros inferiores. Se calcula que esta patología está presente en el 14% de las personas de ambos sexos mayores de 55 años y que el 56% de ellos no presentan síntomas en sus miembros inferiores durante el ejercicio.
El índice tobillo-brazo (ITB) es empleado como un indicador sensible y específico en el diagnóstico de la arteriopatía periférica con una 5% de falsos negativos generalmente atribuible a calcificación arterial extensa.
Se han reportado evoluciones que mencionan la estabilización o mejoría de la claudicación por cinco años sugiriendo una evolución benigna. Estos hallazgos podrían originarse en una limitación espontánea de la actividad de los pacientes más que a un verdadero curso benigno de la enfermedad vascular.
Se ha publicado en la revista JAMA un estudio del Dr. Hirsch y colaboradores, (PARTNERS) que se propone relacionar los hallazgos del ITB y los síntomas basales con la evolución alejada de los pacientes.
Objetivos: definir el modo en que el índice tobillo/brazo y los síntomas de arteriopatía de los miembros inferiores son capaces de predecir la declinación funcional al cabo de dos años de seguimiento.
Métodos: se trata de un estudio prospectivo de cohorte sobre una muestra de 676 pacientes mayores de 55 años con o sin enfermedad arterial (n: 417 y n: 259 respectivamente). Los pacientes fueron sometidos a evaluación inicial y a evaluaciones de seguimiento al cabo del primer y segundo año.
Se definió la presencia en enfermedad arterial periférica cuando el ITB fue menor de 0.90 y se los clasificó en grupos de 1 a 5 en base a su sintomatología y de acuerdo al cuestionario de claudicación de San Diego.
En cada control se relevaron datos acerca de tabaquismo e índice de masa corporal y se realizaron pruebas funcionales de caminata.
La edad promedio de la muestra fue de 71 años, 55% de sexo masculino y con un IMC: 27,2 kg/m2, el 50% padecía enfermedad cardiovascular y el promedio de tabaquismo fue de 30 pack-year.
Resultados:
· Los autores han encontrado que, analizando una población proveniente de la práctica general, se hizo nuevo diagnóstico de arteriopatía periférica en el 11.8% entre los cuales el 41,6% era asintomáticos.
· Los valores del índice tobillo/brazo no mostraron diferencias significativas a lo largo de los 5 grupos en la clasificación según tipo de dolor.
· Los valores más bajos del ITB se asociaron con mayor mortalidad al cabo de dos años de seguimiento.
· Los valores más bajos del ITB se asociaron a mayor deterioro funcional progresivo.
· El deterioro fue mayor entre quienes presentaban síntomas respecto de los asintomáticos.
· Los pacientes con ITB más bajos tuvieron una mayor probabilidad de de resultar inhábiles para caminar 6 minutos al cabo de dos años.
Conclusiones y comentarios de utilidad en la práctica clínica:
· El ITB resulta una herramienta sencilla y de gran utilidad en el diagnóstico y pronóstico de los pacientes con arteriopatía de los miembros inferiores.
· Entre los pacientes portadores de arteriopatía, un ITB basal menor de 0.90 y la severidad de los síntomas funcionales son capaces de predecir el deterioro progresivo en pacientes mayores de 55 años.
· La arteriopatía de los miembros inferiores es una patología prevalente que es subdiagnósticada con frecuencia y su detección proactiva es recomendable en pacientes con factores de riesgo vascular.
· Es conocido por investigaciones previas la alta asociación de esta enfermedad vascular segmentaria con afecciones simultáneas en otros territorios (coronario, carotídeo o cerebral) que comprometen seriamente el pronóstico de los pacientes.
Artículo comentado por el Dr. Daniel Flichtentrei, editor responsable de IntraMed en la especialidad de Cardiología.