Vitamina D y Cáncer de Colon

Científicos españoles descubren una relación entre un derivado de la vitamina D y el cáncer de colon

Investigadores españoles han descubierto una relación entre un derivado de la vitamina D y el desarrollo del cáncer de colon, que podría tener consecuencias relevantes en el diseño de tratamientos para este tumor, uno de los más agresivos, según informó en un comunicado el Instituto Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Investigadores españoles han descubierto una relación entre un derivado de la vitamina D y el desarrollo del cáncer de colon, que podría tener consecuencias relevantes en el diseño de tratamientos para este tumor, uno de los más agresivos, según informó en un comunicado el Instituto Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

El trabajo, dirigido por Alberto Muñoz, del Instituto de Investigaciones Biomédicas Alberto Sols (CSIC), en colaboración con expertos de distintos centros españoles, describe la existencia de una relación inversa entre la expresión del receptor del calcitriol, un derivado de la vitamina D (VDR), en células humanas con cáncer de colon y la proteína denominada Snail. Este trabajo se ha publicado en "Nature Medicine".

En concreto, la proteína Snail inhibe directamente el gen humano VDR y provoca, en consecuencia, una reducción de los niveles de este receptor en las células tumorales.

Los resultados obtenidos sugieren, por tanto, que los tumores con elevada expresión de Snail no responderán al tratamiento con derivados del calcitriol. La expresión de Snail aumenta durante la progresión tumoral, en la transición de adenoma a carcinoma, por lo que los científicos defienden que será conveniente limitar los tratamientos con derivados de la vitamina D a pacientes en etapas tempranas del proceso canceroso.

La vitamina D ingerida en la dieta se convierte en el organismo en un derivado activo, el calcitriol, que funciona como una hormona ejerciendo acciones reguladoras. El calcitriol regula, fundamentalmente, la absorción de calcio y fosfato, y su deficiencia causa raquitismo. En los últimos años se han descubierto otras acciones de esta hormona, como la inhibición de la proliferación y de la invasividad celulares, por lo que se ha pensado que el calcitriol podría tener efectos beneficiosos en el tratamiento del cáncer.

No obstante, el tratamiento continuado con altas dosis de calcitriol es tóxico, ya que eleva los niveles sanguíneos de calcio y provoca calcemia. Las compañías farmacéuticas desarrollan en la actualidad derivados de la hormona que conserven su acción antitumoral pero carezcan al mismo tiempo de efectos hipercalcémicos.

El trabajo ha sido realizado por los grupos de investigación de Alberto Muñoz (Instituto de Investigaciones Biomédicas Alberto Sols del CSIC), Antonio García de Herreros (Instituto Municipal de Investigación Médica de Barcelona), Félix Bonilla (Hospital Puerta de Hierro de Madrid), Carlos Gamallo (Hospital de la Princesa de Madrid), Rufo Rodríguez (Hospital Virgen de la Salud de Toledo) y Antonio Bernad (Centro Nacional de Biotecnología del CSIC).

Webs Relacionadas
Nature Medicine
http://www.nature.com/nm/
CSIC
http://www.csic.es/