Novedades sobre Vitamina E

Vitamina E: la perspectiva europea

La Vitamina E participa en casi todos los mecanismos de defensa del organismo contra las enfermedades crónicas. Su importancia en la alimentación va creciendo.

Autor/a: Dres. Brigelius-Flohe R, Kelly FJ, Salonen JT, Neuzil J

Fuente: Am J Clin Nutr. 2002 Oct;76(4):703-16.

La Vitamina E (E) se descubrió hace 80 años como un micronutrientes indispensable para la reproducción en animales de laboratorio. En humanos, sus funciones esenciales se desconocen y su deficiencia causa principalmente disfunciones neurológicas, por mecanismos desconocidos. El déficit de E por baja ingesta no se observa en humanos, con excepción de los prematuros que pueden presentar anemia hemolítica y retinopatía.

Algunas fallas genéticas en la apo B y la proteína transportadora de a- tocoferol (PTT) pueden ocasionar síndromes de deficiencia grave con síntomas neurológicos como ataxia cerebolosa, pérdida de los reflejos tendinosos profundos, disartria y retardo mental. Puede observarse a veces retinitis pigmentosa y miopatía esquelética.

En rol de la E en el interjuego del músculo y el nervio se desconoce y su rol en la reproducción humana aún no ha sido investigado. Como tiene propiedades antioxidantes (AO), se cree que previenen las enfermedades asociadas a stress oxidativo, como enfermedad cardiovascular, cáncer, inflamación crónica y desórdenes neurológicos. No todos los estudios muestran las mismas conclusiones. Un panel de expertos de USA aumentó la recomendación diaria un 50% de 10 a 15 mg/día y en Europa se aumentó 3 mg/día, quedando también en 15 mg.

Metabolismo de la E:

Hay 8 formas químicas de E, y las formas comerciales de E son una mezcla de algunas. Todas las E se absorben en intestino y se transportan por los quilomicrones remanentes al hígado. Allí una PTT selectivamente capta el a- tocoferol y los incorpora a las VLDL. Las otras formas de E se retienen mucho menos y se excretan por la bilis. La capacidad plasmática de aumentar el a- tocoferol es limitada a 2-3 veces en los que no tienen carencia. Esta limitación no sería por la absorción, sino porque al aumentar el aporte de E aumenta el recambio de a- tocoferol en las lipoproteínas. No todos los sujetos suplementados con E tienen la misma respuesta. Depende de la actividad de la PTT, la tasa metabólica, el contenido y composición de lípidos, el estado de otros micronutrientes y condiciones ambientales.

La E se metaboliza antes de su excreción en complejas vías metabólicas. Gran parte de sus metabolitos se excreta por orina.
La E se metaboliza por el sistema CYP3A, que es un sistema de metabolización de un amplio espectro de drogas como esteroides, antibióticos, (rifampicina), etc. El a- tocoferol natural no es reconocido por este sistema como extraño y no se degrada, mientras que el racémico sí. El citocromo P450 también lo puede degradar, por eso las interacciones con drogas deben ser consideradas al suplementar a pacientes medicados. Las megadosis de E pueden inhibir la agregación plaquetaria. Se recomienda no administrar anticoagulantes y E en forma simultánea.

La E viaja en el plasma por las lipoproteínas y el transporte intracelular se hace por proteínas facilitadoras como la proteína ligada al retinol y otras que regulan los receptores nucleares que van a permitir que la E interactúe con el ADN.
La PTT puede fallar por causas genéticas y ocasionar cuadros de ataxia. La PTT se expresa principalmente en le hígado y su expresión depende de la ingesta de tocoferoles. Se han detectado pequeñas cantidades en cerebro, bazo, pulmones y riñón. La E se intercambia entre las HDL y LDL en un proceso facilitado por proteínas.

E y Reproducción:

Los niveles de E aumentan proporcionalmente al crecimiento fetal. La suplementación de E se hace habitualmente en la cría de animales. Se han reportado dificultades en el desarrollo fetal si hay déficit, pero no hay reportes en humanos. Durante el embarazo los niveles séricos de a- tocoferol aumentan en asociación con los lípidos y aumentan los requerimientos de E. La suplementación al final del embarazo mejora los niveles de la madre, pero no del bebé.

E Y Enfermedades por Stress Oxidativo:

Enfermedad Cardiovascular (EC):

Hay 2 teorías que explican la aterogénesis: la del stress oxidativo y la de respuesta a la injuria. En ambas la oxidación de las LDL es un paso clave en el inicio y la progresión de la EC. La E inhibe esta oxidación. Los efectos de la suplementación no han reportado siempre beneficios. Un estudio que suplementó a 11.324 pacientes previamente infartados con E más 1 g/día de ácidos grasos poliinsaturados mostró in 20% menos de muerte por EC que los controles. Otro con 196 pacientes en hemodiálisis con EC tuvo 54% menos mortalidad por EC si recibían suplementos de E, que los controles. Es difícil sacar conclusiones definitivas ya que los estudios son en poblaciones muy diferentes, con diferentes enfermedades y grados de las mismas, y se usaron distintas dosis y tipos de E.

Cáncer:

Debido a su capacidad AO, la E puede proteger de daños celulares que llevan al cáncer. Un estudio chino con 15.000 sujetos que recibieron una mezcla de E, selenio y A por 5,5 años reportó una disminución de 13% de cáncer y 10% menos de mortalidad por cáncer de esófago y estómago que los controles.

Fibrosis Quística:

En esta enfermedad es frecuente la falta de E por malabsorción. Como los pacientes sufren procesos inflamatorios subagudos en forma frecuente aumentan las necesidades de AO. Se recomienda suplementar con 100-400 UI/día de E. Puede observarse una disminución del tiempo de protrombina.

E Y preeclampsia:

Las mujeres suplementadas con E tienen menos riesgo de eclampsia: 8% versus 17% en los controles, en una población de mujeres con alto riesgo.

Mecanismos No Oxidativos:

La adhesión de los leucocitos al endotelio vascular es un proceso complejo, mediado por mecanismos inflamatorios. La E atenúa este proceso por vías donde no actúa como AO y en las que participa la regulación de la actividad de una proteín-quinasa.
La influencia del a- tocoferol sobre los genes es uno de los principales descubrimientos de la E en los últimos tiempos.  Este efecto se realiza en el núcleo celular y forma parte de la nueva rama de la medicina "la Nutrigenómica"
La E también mejora la defensa inmune a los tumores, induce la apoptosis, y modificar el perfil hormonal, previniendo el cáncer

A pesar de que durante mucho la E se asoció sólo con su función AO relacionada con los lípidos, nuevas funciones de estas vitaminas se van conociendo. A medida que avancen las investigaciones, nuevas recomendaciones de ingesta de E podrán realizarse con más precisión, ya que su mayor aporte parece promover la salud.