Definición: El abdomen agudo ginecológico se caracteriza por un dolor abdominal y un compromiso del estado general donde la patología asienta en los órganos genitales. Es más frecuente en edad reproductiva.
Etiología: El abdomen agudo puede ser de causa ginecológica, médica o extraginecológica. A saber:
A. Causas ginecológicas:
1) Infección: Enfermedad Inflamatoria Pelviana (EPI), necrobiosis de un mioma.
2) Hemorrágico: Hemoperitoneo: Embarazo ectópico, folículo sangrante.
3) Mecánico: Torsión anexial.
4) Hormonal: Hiperestimulación ovárica, Enfermedad Trofoblástica Gestacional.
5) Traumático: Postaborto evacuador o biópsico, hemorragia, perforación, infección.
6) Endometriosis
B. Causas médicas:
Metabólicas, tóxicas, porfirias, uremia, diabetes, hemofilia, púrpura, pielonefritis, neumonía, insuficiencia suprarrenal.
C. Causas extraginecológicas:
Apendicitis aguda, diverticulitis, cólico renal, aneurisma de la arteria iliaca, colecistitis.
Tabla 1. Diagnóstico diferencial entre dolor ginecológico y abdominal:
Causas ginecológicas (en orden de frecuencia):
1) Embarazo ectópico.
2) Enfermedad pelviana inflamatoria (E.P.I.).
3) Torsión anexial
Diagnóstico: Debemos precisar si se trata de un cuadro agudo, si es un abdomen agudo médico o quirúrgico, si es de origen ginecológico y cual es su etiología.
Para ello es importante:
· La anamnesis
· El examen clínico general
· El examen ginecológico
· Los exámenes complementarios: laboratorio general con subunidad beta, ecografía y eventualmente laparoscopía.
Anamnesis
Interrogar el momento del ciclo menstrual en que se encuentra la paciente (la torsión de un quiste funcional se produce en la fase lútea y la hemorragia intraquística de un endometrioma ocurre más frecuentemente en el período menstrual).
Si hay atraso menstrual, hacer una prueba de embarazo para descartar un embarazo ectópico.
En caso de una paciente con un cuadro febril, la historia de un coito o de un procedimiento diagnóstico (histerosonografía, histerosalpingografía, biopsia de endometrio) o terapéutico invasivo reciente, orienta hacia un proceso inflamatorio pélvico.
Puede existir el antecedente de un tumor anexial en control o una historia de infertilidad con una hiperestimulación ovárica en el último tiempo.
Descartar síntomas de compromiso vesical (disuria, polaquiuria o tenesmo) o rectal (colitis, pujo o tenesmo rectal).
Los síntomas rectales y la omalgia hablan de la presencia de sangre libre intraabdominal, con irritación del recto y del diafragma respectivamente.
* La Dra. Geller es editora responsable de IntraMed en la especialidad de Tocoginecología.