La menopausia (M) se caracteriza por una rápida pérdida de masa ósea (MO). Los nutrientes asociados con la ingesta de frutas y verduras (potasio, magnesio) se asocian con mayor densidad mineral ósea (DMO) en mujeres años después de la menopausia. Otros trabajos mostraron que la ingesta adecuada de vitamina C, niacina, hierro, zinc, proteínas, cobre, manganeso y fósforo, también protege los huesos. Existen controversias acerca de la recomendación de Calcio diaria: en Inglaterra se recomiendan 700 mg diarios y en USA 1500 mg. La ingesta promedio de Calcio es 344 mg diarios en los países en desarrollo y 850 mg en los desarrollados. A pesar de estas diferencias la prevalencia de osteoporosis es igual. Las dietas occidentales tienen más sal, proteínas animales, grasas (forman jabones de calcio e inhiben la absorción) y metabolitos ácidos.
Objetivo:
Determinar qué factores nutricionales influencian la pérdida de MO en la perimenopausia
Métodos:
Estudio longitudinal, de 5-7 años de seguimiento, con 891 mujeres de 45-55 años al inicio del estudio, y 50-59 años al final.
Se les midió la (DMO) por DEXA en la cabeza femoral y la columna lumbar y se comparó con la ingesta medida por cuestionarios de frecuencia, al inicio y al final del estudio. Se incluyeron datos antropométricos y del estilo de vida.
Resultados:
La ingesta de más Calcio protegió los huesos de la pérdida de MO en el fémur, igual que la ingesta moderada de alcohol en la columna lumbar. Una mayor pérdida de MO femoral se asoció con más ingesta de ácidos grasos poliinsaturados (PUFA), monoinsaturados (MUFA), retinol y vitamina E.
En las mujeres premenopáusicas, el calcio y los nutrientes de frutas y verduras (vitamina C, magnesio y potasio) tuvieron efectos positivos sobre la DMO.
Discusión:
El Calcio mejora la DMO y disminuye la pérdida ósea cortical en la menopausia temprana. Los MUFA y PUFA se asociaron negativamente con la DMO. La ingesta de más grasa puede implicar peor calidad nutricional y menos nutrientes protectores. Se postula que más grasas generan más hiperinsulinemia, lo que lleva a un balance negativo de calcio y magnesio, además forman jabones con el calcio en el intestino y pueden acompañarse de mayor ingesta de retinol que aumenta la resorción ósea.
La ingesta moderada de alcohol se asoció en este estudio con un efecto positivo, tal vez a través de la estimulación de la androstenediona adrenal y su conversión a estrógenos, a través de la estimulación de la calcitonina y la presencia de antioxidantes en el vino tinto
En el grupo de mujeres premenopáusicas la ingesta de frutas y verduras implicó más DMO. Puede explicarse por el mayor aporte de vitamina C y magnesio, y porque los vegetales aportan sales alcalinas que neutralizan el exceso de ácido de las dietas occidentales y así mejoran el balance de calcio.
Conclusión:
La dieta es fundamental para la salud ósea en mujeres. Una alimentación saludable, con más calcio, frutas y verduras y el consumo de 1 vaso de vino tinto diario mejoran la DMO en los años en que se inicia la menopausia.
Artículo comentado por la Dra. Débora Setton, editora responsable de IntraMed en la especialidad de Nutrición.