La enfermedad diverticular (ED) del colon involucra a la diverticulosis, esto es la presencia de divertículos a cualquier nivel del órgano generalmente asintomática, y a su principal complicación, la diverticulitis que se desarrolla en 15-25% de los casos y sangrado diverticular de los mismos que se verifica en un 5-15% de las situaciones.
La ED es más frecuente en individuos añosos; sólo el 2-5% de los casos se inician antes de los 40 años. En estos pacientes, la ED se observa generalmente en hombres, particularmente con sobrepeso significativo. El manejo de este grupo de pacientes es controvertido. Desde que la historia natural demuestra una clara tendencia a la recurrencia y a la presentación de complicaciones, usualmente requieren ser operados, idealmente de manera programada, de no existir una co-morbilidad significativa.
Etiología
Bajo consumo de fibras dietarias:
Si bien el concepto es algo controvertido, se asume que una dieta pobre en fibras es un posible agente etiológico en el desarrollo de los divertículos. Así se ha informado que el riesgo relativo de desarrollar ED es 0.58 en hombres que ingieren una cantida pobre de fibras; asimismo, la ED es claramente menos frecuente en individuos vegetarianos.
Riesgo de Complicaciones:
Se ha observado mayor número de complicaciones de la ED en pacientes fumadores, en quienes reciben antiinflamatorios no esteroides, en obesos y en quienes se alimentan con bajo contenido de fibra. Por el contrario, las complicaciones de la ED no son más frecuentes en pacientes que beben alcohol ni se relaciona con el consumo de cafeína.
Distribución de los divertículos:
- Exclusivamente sigmoideo 65%
- Sigmoides y otras área colónicas 95%
- Todo el colon 7%
Diverticulitis
Este término se refiere al espectro de cambios inflamatorios que van desde una mínima alteración inflamatoria hasta la peritonitis generalizada con perforación libre en la cavidad. En más de las tres cuartas partes de los pacientes no experimentan complicaciones, el 25% restante pueden presentar abscesos, fístulas, obstrucción, peritonitis ó sepsis.
La mayor parte de los pacientes experimentan dolor en la fosa iliaca izquierda, con refuerzo del mismo a la descompresión cuando existe algún grado de compromiso peritoneal.
Otros hallazgos importantes pueden ser la fiebre y la leucocitosis. Algunos síntomas urinarios, como la polaquiuria puede sugerir la presencia de un absceso pélvico. Entre los diagnósticos diferenciales más importantes se encuentran: neoplasia de colon, colitis isquémica, sindrome de intestino irritable, enfermedad inflamatoria intestinal, apendicitis y pielonefritis.
El diagnóstico basado en los datos clínicos es correcto sólo en un tercio de los casos. Entre los estudios complementarios utilizados se encuentran:
1- Radiografía simple de abdomen: Demuestra hallazgos inespecíficos como dilatación de intestino delgado ó colon, ileo, obstrucción intestinal, ó densidades de tejidos blandos sugestivas de absceso. Asimismo se puede observar neumoperitoneo en un 10% de los pacientes que sufren diverticulitis aguda.
2- Ecografía abdominal: sus hallazgos incluyen el engrosamiento de la pared colónica y la presencia de masa abscedadas.
3- Tomografía computada: Metodología de mayor valor que la ecografía dado que evalúa la pared intestinal y el mesenterio con una sensibilidad de 69-98% y una especificidad de 75-100%. Entre sus signos se destacan el engrosamiento de la pared abdominal, streaky de la grasa mesentérica y la observación de abscesos asociados.
4- Colon por enema baritada: Este estudio está contraindicado en episodios agudos de diverticulitis a excepción de que se sospeche una asociación con neoplasia.
5- Endoscopia digestiva baja: Este estudio está contraindicado en episodios agudos de diverticulitis a excepción de que se sospeche una asociación con neoplasia.
* Departamento de Medicina del Hospital Bonorino Udaondo.