Todos los varones con niveles deficientes de testosterona incluidos en el estudio sufrían la condición denominada hipogonadismo, condición también caracterizada por una disminución de la masa ósea y muscular y por un menor interés en el sexo. En este contexto, debe tenerse en cuenta que la incidencia del hipogonadismo –enfermedad que padece hasta el 30% de la población masculina mayor de 55 años– aumenta conforme con la edad.
Para llevar a cabo este estudio, 278 hombres mayores de 45 años fueron sometidos a un seguimiento durante 2 años con objeto de analizar quiénes desarrollaban una depresión. Hasta 23 de los pacientes fueron diagnosticados de hipogonadismo. Así, en torno a un 20% de los pacientes con niveles deficientes de testosterona desarrollaron una depresión durante el período de estuido. Por el contrario, la depresión afectó a tan sólo el 7% de los varones que presentaban niveles normales de la hormona.
Según explicó el Dr. Shores, “los resultados alcanzados parecen sugerir que la administración de testosterona a los hombres que padecen depresión y presentan bajos niveles de testosterona podría mejorar su estado de ánimo”. Sin embargo, también añadió que las evidencias alcanzadas en estudios anteriores sugieren que la solución para algunos estados de depresión en los varones puede resultar no tan simple.
La investigación llevada a cabo previamente ha demostrado que la testosterona ayuda a corregir la depresión en pacientes seropositivos que también padecen hipogonadismo. Y, asimismo, que la adición de la hormona a la terapia antidepresiva puede ayudar a mejorar el estado de ánimo. Así, la mejoría es mayor que en los casos en los que únicamente se administran fármacos antidepresivos.
A este respecto, sin embargo, debe también tenerse presente que en este estudio, el úncio diseñado para analizar si la testosterona ayuda en el tratamiento de la depresión en varones de edad elevada que sufren hipogonadismo, se ha mostrado que la hormona no actúa de manera más efectiva que un fármaco inactivo. Por ello, en palabras del Dr. Shores, “se hace necesario realizar más estudios antes de establecer que la testosterona debe ser administrada para el tratamiento de la depresión en varones de elevada edad. En consecuencia, y dado que se corresponde con el único régimen terapéutico que ha mostrado ser efectivo en numerosos estudios, el tratamiento de las depresión mayor debe estar constituido por la administración de fármacos antidepresivos convencionales”.
Hasta el momento no se han hallado evidencias que sugieran que los varones con depresión y niveles relativamente normales de testosterona puedan beneficiarse de los suplementos de esta hormona.
Según el director del estudio, existen varias razones por las que se pueda explicar porqué la deficiencia en los niveles de testosterona puede estar asociada con la depresión. No en vano, los síntomas del hipogonadismo –caso de la fatiga, la pérdida de masa muscular y la disminución de la líbido– puden inducir a una bajada del estado de ánimo. Asimismo, los cambios en los niveles hormonales también pueden conllevar a la aparición de la depresión.
Webs Relacionadas
Universidad de Washington, Seattle
http://www.washington.edu/
Archives of General Psychiatry
http://archpsyc.ama-assn.org/