Examinaron el efecto del tabaco sobre la respuesta a los esteroides orales en 50 pacientes con asma crónica. En concreto, la muestra incluía 14 fumadores, 10 ex fumadores y 26 que nunca habían fumado. Fueron tratados con prednisolona o placebo durante 2 semanas.
El tratamiento dio lugar una mejoría significativa respecto al placebo entre los no fumadores, pero los beneficios de la terapia fueron mucho más limitados en ex fumadores, mientras que entre los fumadores apenas se observaron beneficios. Para los autores, estos datos sugieren la necesidad de fármacos alternativos para aquellos pacientes que fuman o han sido fumadores en el pasado, y ponen de manifiesto la necesidad de abandonar el hábito para los asmáticos.